Dolores Hidalgo, Gto. La Casa Museo José Alfredo Jiménez ya se encuentra lista para recibir a visitantes tanto nacionales como extranjeros, que se espera sumen 14 mil turistas en esta temporada de semana santa y de pascua.

Desde hace tiempo, los visitantes en Dolores Hidalgo llegan con la pretensión de conocer la casa natal de José Alfredo Jiménez, que ha sido convertida en un gran museo con una gran cantidad de objetos personales, fotografías en gran tamaño, música ambiental y videos.

En este lugar nació, el 19 de enero de 1926, el gran compositor dolorense, que hizo sus estudios primarios en la escuela del Centenario, que se encuentra enfrente del lugar que lo vio nacer.
En el Museo, con ocho salas -cada una con el nombre de una canción-, podremos encontrar objetos personales y el gran legado musical del cantautor que ha sido reconocido como una figura de talla mundial y máximo exponente de la música vernácula mexicana.

Las salas
“Ese pueblo de Dolores”: infiere sobre la infancia de José Alfredo en esta ciudad y su posterior traslado de su familia junto con él a la Ciudad de México, al fallecer su padre.
“Cuatro caminos”: Señala los primeros trabajos y comienzo de su carrera artística.
“Qué suerte la mía”: Muestra las presentaciones en la radio y sus primeras grabaciones y su ascendente éxito.
“Paloma querida”: Donde se perfila el noviazgo matrimonio con Paloma Gálvez, referido por un cancionero interactivo con módulos de consulta que presentan su extensa producción musical.
“El Rey”: Se muestran los triunfos del compositor a lo largo de dos décadas, en las que compuso alrededor de 300 canciones y grabó decenas de discos.
“Estoy en el rincón de una cantina”: Muestra los excesos y vicisitudes del medio artístico, a los que José Alfredo estuvo expuesto.
“La vida no vale nada”: Donde se conoce la prematura muerte de José Alfredo y su última presentación en público.
“Olvídate de todo menos de mí”: Dedicada a la permanencia de sus canciones que, además de constituir una parte fundamental de la música ranchera, son adaptadas e interpretadas por cantantes de otros géneros.

En la Casa de José Alfredo han llegado parejas de enamorados a entregarle anillo de compromiso a su prometida, personas que siempre han tendido la música del dolorense como un referente de la música mexicana sobre todo los colombianos, que siempre han sentido un gran fervor fraterno hacia el “Rey”, además de los jóvenes admiradores del cantante que incluso se han tatuado la imagen de José Alfredo en su cuerpo, y así más cientos de anécdotas que se pueden contar de los miles de admiradores del compositor dolorense.
Este museo fue diseñado para ser un centro cultural, por lo que cuenta también con una sala de usos múltiples, un patio y una huerta, como espacios abiertos a la cultura, en los que se organizan exposiciones temporales, ciclos de cine, conferencias, programas musicales y presentaciones de libros, entre otras actividades afines.