Julio Iglesias, un padre distante, según su ex representante. Foto: EFE
Ciudad de México, 15 de marzo (SinEmbargo).- Todos saben que en el rostro de Julio Iglesias hay un perfil que no se puede mostrar, el que quedó deformado luego de una operación estética a la que el cantante español se sometió desatendiendo el consejo en contrario de su manager, Alfredo Fraile.
Es un perfil oscuro que resulta una metáfora más que gráfica para acercarse a la compleja personalidad de un artista muy popular y querido en su país de origen, probablemente el más internacional de todos los tiempos en España, un estatus que comparte con su colega Raphael.
Esa parte desconocida y poco luminosa del ex jugador de futbol e intérprete romántico es develada por Fraile en un libro de memorias que escribió por exhorto de sus hijos, quienes lo convencieron “de hacer algo que nunca hubiera imaginado que iba a hacer”.
El autor de Secretos inconfesables, quien ha sido también representante de Silvio Berlusconi y Adolfo Suárez, llena las páginas de la prensa rosa española con sus revelaciones, aun cuando se ha encargado de aclarar firmemente que vale más “por lo que callo” que por lo que realmente dice.
Estuvo 15 años al lado de Julio y puede decirse que a él debe gran parte de su éxito el intérprete de “Me olvidé de vivir”, un reconocimiento que sin embargo le ha escatimado como amargamente se ha encargado de destacar Fraile en diversas entrevistas periodísticas.
En el libro, el ex manager asegura que a Julio Iglesias sólo le importa su carrera y que fue ese el hecho principal por el que estuvo siempre alejado de sus hijos, entre ellos el famoso Enrique, cantante como él y al que siempre le restó su apoyo.
“Julio se sintió dolido por esa falta de confianza de su hijo en pedirle consejo y conociendo a Julio hubiese querido estar por encima, darle consejos, hubiese querido cambiar todo lo que Enrique hizo”, afirma Alfredo Fraile.
A sus casi 70 años, Julio Iglesias luce radiante. Foto: Sony Music
Cuando Enrique hizo su primer disco y vendió un millón de copias, la opinión de su padre fue tajante y nada estimulante: “Los vendes porque eres mi hijo”, dijo.
“El tiempo lo cura todo, y espero que así sea. Se quieren mucho y a lo mejor algún día cantan juntos, aunque será difícil”, opina Fraile al destacar la enorme grieta que existe entre Julio y Enrique.
NO TUVO CUATRO MIL MUJERES
A pesar de que a Julio Iglesias lo persigue la fama de mujeriego que el mismo artista ha alimentado al afirmar que en su agenda tenía los datos de 4 mil damas a las que había conquistado, Fraile desmiente el número y revela que “sólo había mil” en esa famosa libretita de Cartier con las iniciales del cantante.
A todas les pagaba una operación de busto para que tuvieran el tamaño de su agrado, pues como solía decir el doctor Iglesias, padre del cantante, “a Julio le gustan pechugonas”.
Foto: Especial
Precisamente, en Secretos inconfesables, Fraile evoca el secuestro que padeció el progenitor del vocalista, quien siempre se sintió culpable del hecho
“Él se sintió culpable porque es verdad. Lo secuestraron por ser el padre de Julio Iglesias, no por ser el doctor Iglesias”, escribe el biógrafo.
“Era una persona que cuidaba a todo el mundo, de todo tipo y los trataba maravillosamente bien. Era adorado por toda la gente que lo conocía, nunca lo hubieran secuestrado”, agrega.
JULIO IGLESIAS EN MÉXICO
Mientras en España es noticia por el libro de su ex representante, sobre el que no se ha pronunciado públicamente todavía, “porque además no lo leerá, Julio es incapaz de leer un libro” (Fraile dixit), Iglesias regresa a México para ofrecer un concierto exclusivo este 25 de marzo en el Campo Deportivo del Estado Mayor Presidencial bajo el concepto de Show VIP a beneficio de la fundación VIFAC.
Cantará sólo para las 2 mil personas que paguen el boleto, según reveló VIFAC, organización antiabortista fundada en 1985, ligada a la iglesia católica y a grupos derechistas, con sede en Aguascalientes.
