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viernes, marzo 29, 2024

GIFF 2018: Mapplethorpe (2018)

Ondi Timoner es una realizadora capaz. Uno de sus primeros trabajos y que de verdad disfruto mucho es Dig! (2004) en la que retrata la rivalidad de The Dandy Warhols y The Brian Jonestown Massacre, bandas de culto que pasaron de la amistad a peleas sacadas de tu talk show favorito; el camino del documental ha sido frecuente en su carrera y con Mapplethorpe, la directora apunta al camino del drama biopic, su primera aproximación al género y proyecto por el cual estaba más emocionado de ver dentro de toda la alineación del GIFF.

Y… es decepcionante.

Mapplethorpe para quien no lo sepa, fue un fotógrafo trasgresor del siglo pasado que en el ascenso meteórico de Nueva York como sede de los grandes artistas, comenzó a formarse en dupla con Patti Smith –su siempre amiga- y con sus series de trabajos, que comenzaron siendo de flores, pasando por escenas de alto contenido sexual homoerótico que causaron revuelo, y que le dieron cercanía a los artistas de la cultura pop que lo veían como un Warhol en potencia, desgraciadamente la carrera de Mapplethorpe y su batalla contra la censura iba de la mano con la batalla contra el sida, que lo mató en 1989.

Hay gran material a explorar o para profundizar, pero por alguna razón Timoner se siente contenida en su proyecto. El arco que decide plasmar para Robert Mapplethorpe va desde su salida del servicio militar hasta su muerte, y nunca terminamos por conocer al personaje principal, sus razones, o sus relaciones fuera del caso anecdótico. Es como la película tuviese una lista de cosas que quiere resaltar y las hace pero jamás dándole detalle del por qué decidiría ponerse a analizar esto. El problema es típico en el género del biopic, pero aquí afecta de tal grado que se percibe un desinterés enorme por parte de la realizadora y de Mikko Alanne, coguionista del proyecto. Irónicamente, queda retratada la vida de Mapplethorpe en un tono conservador y cliché, jamás mostrándose desnudo, con un paso atrás en sus relaciones sentimentales y mostrándolo como un imbécil presumido que rechaza a toda su familia vanagloriándose de su capacidad artística, siendo que en vida real se volvería una de las personas más controversiales en el arte durante la década de los años ochenta por su constante lucha e incomodidad por parte de la industria del arte pomposa.

Cliché y a velocidad, porque si te distraes un poco, la vida de Mapplethorpe avanza décadas sin sentir consecuencias y personajes aparecen y desaparecen de su vida… siendo el más notorio el caso de Patti Smith, que deja a uno rascándose la cabeza pensando en por qué decidieron ponerla en primera estancia para jamás explorar esa relación que en otros medios se ha representado con belleza.

Mapplethorpe es un proyecto de ensueño que jamás despega, ni con una realizadora preparada, ni con un cast potencial (porque Matt Smith hace lo que puede con un proyecto tan apagado), y sea cuestiones de presupuesto o de conflictos creativos por parte de la producción, lo cierto es que no es la mejor de las introducciones en el mundo del fotógrafo.

 

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