Una mujer identificada como Serena Curtis, de 31 años bebió 2 botellas de vino con un amigo y luego de enviar a dormir a su 3 hijos, se puso a jugar metiéndose en la silla de su pequeño hijo, pero se atoró.
Según publica The Sun, Curtis tuvo que ser rescatada por bomberos en Oxford, Inglaterra.
Su amigo intentó sacarla por más de una hora sin éxito, por lo que llamó a los bomberos, quienes finalmente la rescataron.
Su cómplice en esta “travesura” registró el incidente con su teléfono y lo subió a YouTube
Con información de agencias.