Con sus hijas ya crecidas, el presidente Barack Obama probablemente no ha tenido que calmar a un bebé lloroso durante los últimos años.
Pero en el siguiente video, Papá Barry (como es conocido entre sus cercanos) se ve como todo un profesional. Cuando una admiradora le da a cargar su bebé a su esposa Michelle, los llantos retumban a la distancia, perp Barack se ríe y dice enternecido “Es mejor darle (golpecitos) en la espalda”.
En lugar de eso, Michelle acepta el reto y le cede a la niña. El presidente, con tranquilidad toma a la pequeña, la recarga en su hombro y la toca la espalda. Para admiración de todos (especialmente de Michelle), la bebé deja de llorar de inmediato. La expresión facial de la primera dama de Estados Unidos no tiene precio.
El presidente Obama, por su parte, sólo remata con un “te lo dije” con una sonrisa resplandeciente en el rostro.
