León, Gto. Los Bravos de León tienen todavía una vela encendida, esperando un verdadero milagro para poder calificar a las finales de la Liga Mexicana de Béisbol y es que su única esperanza es ganar los nueve partidos que le restan esta temporada y esperar que sus rivales pierdan todos sus duelos.
Los equipos involucrados son los Pericos de Puebla y los Tigres de Quintana Roo que están teniendo un cierre frenético por ese lugar en los playoffs, quienes además están teniendo buenas actuaciones tanto en casa como de visita.
El rival de esta primera serie son los Olmecas de Tabasco, equipo al que Bravos está obligado a “barrer” en el diamante del Domingo Santana, donde dicho sea de paso, no han tenido buenas series desde la llegada de Luis Carlos Rivera, solamente han ganado una sola serie.
El abridor leonés será José de Paula, lanzador que ha tenido buen arranque con la novena leonesa y para el miércoles está programado Walter Silva, una lucha del equipo leonés de la mano con la última esperanza.
