Madrid (SinEmbargo/Agencias). Un empate sin goles motivó otro frenazo del Atlético de Madrid, conformista y dominado en el primer tiempo al ritmo y el futbol del Celta, que luego resistió la insistente y tardía ofensiva del conjunto rojiblanco para repuntar en la Liga, con un punto más que merecido en el estadio Wanda Metropolitano.
Con tensión final y con el tremendo esfuerzo visible en varios jugadores del Celta, cuyo trabajo fue de incontestable mérito, el partido evidenció un equipo madrileño que jugó tanto con los tiempos del encuentro, con los esfuerzos, que, cuando de verdad ambicionó el triunfo, ya sólo le quedaba media hora. Y no fue suficiente (0-0).
Hay varias lecturas del once de Simeone que desprenden más que una elección puntual: Giménez, Koke y Saúl son intocables y ni siquiera con las rotaciones entraron ni Marcos Llorente, descartado de la convocatoria, ni Mario Hermoso, suplente, mientras Felipe Monteiro hacía su debut como titular, igual que Héctor Herrera, tras su irrupción clave ante el Juventus. Este sábado jugó 60 minutos.
Ni aún así ha logrado la constancia en la titularidad. Es suplente. Incluso cuando la exagerada confianza de Simeone en Lemar no entra en la ecuación, porque el francés estaba fuera del duelo por unas molestias musculares. Ni aun así, Vitolo tiene el vuelo que merece y exige su rendimiento en la actual temporada en el Atlético.
Los laterales también son indiscutibles en este nuevo Atlético; en el once y en el desarrollo del juego, por la transcendencia que asumen en cada partido. El primer tiempo ofensivo rojiblanco, por ejemplo, se resume en ellos; en el golpeo a balón parado de Trippier -otro asunto son sus problemas defensivos- y en el trallazo que soltó Renan Lodi para disimular el dominio de su adversario. Luego, el brasileño desbordó, centró, corrió. Fue el mejor activo local.
🇲🇽🚨La postal del día!🇲🇽🚨
El saludo entre Herrera y Araujo en el #ATL 🆚 #Celta 👏🇲🇽 pic.twitter.com/7hF2DqWJws
— Rica_Sport 😉⚽⚾🏀🏈🥊 (@Rica_Sport) September 21, 2019