León, Gto. Esta vez no hubo milagro, León repartió puntos con el Atlas en un partido donde los Zorros eran la virtual víctima.
La Fiera se ha acostumbrado a sufrir, por lo menos en esta campaña así lo han demostrado, no es un equipo que mantiene el nivel durante los 90 minutos y aunque es explosivo, además se contundente, parece por momentos que apelara también a la suerte.
El Atlas, un equipo que en el papel llegaba como aparente víctima, se metió con cautela a la cancha del estadio León, sabiendo que tirarse a matar era una misión suicida.
Los Esmeraldas que arañaban el liderato de la tabla salieron a jugar como saben, con una vocación ofensiva, con una implacable zona de ataque que tiene un arsenal que ha destrozado a cualquier cantidad de esquemas defensivos en liga.
Y tal como lo hizo Juárez, los Zorros apostaron por darle el balón a los de Nacho Ambriz, priorizando el orden defensivo, pero sin descuidar tampoco la obligación de atacar por momentos, no siempre en contragolpe pero si con pocos hombres al frente.
La obligación era cuidar a León en las bandas y aún así, Fernando Navarro y Jean Meneses tiraron centros peligrosos que en la primera mitad, ni una sola pierna esmeralda.
Los Zorros, astutos como su naturaleza, aprovecharon una de las más claras que tuvieron, Omar Govea con un disparo fuera del área se encargó de vencer al siempre seguro Rodolfo Cota y la visita sorprendía.
León adelantó líneas y obligó a los tapatíos a replegarse aún más.
La Fiera intentaba y cerca del medio tiempo pudieron empatar pero el colombiano William Tesillo voló el esférico con el marco abierto.
Comenzando la segunda mitad, Yairo Moreno levantó a la Fiera e hizo rugir el Nou Camp al marcar el gol del empate y todavía quedaba tiempo para darle la vuelta.
Leo Ramos entró al juego y tuvo su oportunidad de marcar el segundo tras un error de la defensa atlista pero no pudo conectar bien y Camilo Vargas se interpuso en el camino.
En un mano a mano Ismael Sosa tuvo para poner al frente a la Fiera, sin embargo una vez más Camilo estuvo atento y le cerró el ángulo de disparo.
Los Rojinegros agarraron valor y adelantaron líneas, con la entrada del “Rifle” Andrade. La visita llegaba y respondía con lo que tenía.
En la cancha era un León desconocido, dominado en la última parte del encuentro, como pocas veces se ha visto en su casa desde la llegada de Nacho Ambriz, daba la sensación de que el rival se podía llevar los tres puntos.
Pero el León es un equipo que no se rinde, buscó y buscó, tuvo otra desde en tiro libre con Luis Montes pero un crecido Camilo no estuvo dispuesto a dejar entrar nada, el Atlas sacaba un gran resultado en la casa del sublíder.
Al final a pelotazos los tapatíos defendieron el punto y le dieron a León un golpe de realidad.
