No se pueden cuantificar todavía los daños materiales y humanos, además de los psicológicos en Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Puebla, Morelos, Veracruz, Estado de México, Ciudad de México, Hidalgo, Michoacán y Tlaxcala.
¿Habrá responsables de los edificios construidos después del sismo del 19 de septiembre de 1985, caídos o con daños en 2017? Recordemos que el PRD gobierna la Ciudad de México desde 1997, es decir, durante 20 años, ellos dieron contratos de construcción, ¿verificarán las nuevas estructuras de los edificios que están construyendo en 2017?, por cierto el PRD también gobierna Morelos.
La destrucción que provocó el terremoto de 1985 y el de 2017 cambió la vida política de México, en las elecciones presidenciales existió un fraude técnico y en 1997 el PRD ganó las elecciones en la Ciudad de México, en el 2000 el PAN triunfó en las elecciones presidenciales.
Después del rescate de los cuerpos con vida y sin vida, las familias afectadas se organizan en defensa de sus viviendas y surgen las asambleas de barrios en 1985, surgen organizaciones para defender a las víctimas. No existía un Plan de Reconstrucción, ahora sí existe.
El 27 de septiembre en 1985, aproximadamente 30 mil personas realizaron la primera movilización de damnificados pidiendo créditos baratos, regularizar el abasto de agua y luz, servicios públicos, funcionamiento de escuelas, hospitales y edificios de gobierno, en 2017 existen estos mismos problemas en algunas zonas; el 24 de octubre de 1985 se crea la Coordinadora Única de Damnificados.
El gobierno organizó la campaña “México sigue en pie” en 1895, ahora en 2017 es “Fuerza México”; renunció en 1985 el constructor de varios edificios que colapsaron durante el sismo, el Secretario de Desarrollo Urbano y Ecología de aquel entonces, en su lugar llegó Manuel Camacho Solís, quien empieza a negociar con los líderes y firma el Convenio de Concertación Democrática para la reconstrucción, a ningún funcionario se le fincan responsabilidades, esto lo impulsa a ocupar la Jefatura del Departamento del Distrito Federal y no le alcanzó para logar la candidatura presidencial del PRI en 1994, pero sí fortaleció a los líderes de los damnificados.
En octubre de 2017, todavía existen damnificados del sismo de 1985, no se dejaron manipular porque el coraje contra el gobierno es grande, inmenso, incluso el movimiento estudiantil en la UNAM de 1986-1987 fue producto de este escenario social y la fractura del PRI, que se reflejó en la elección presidencial de 1988.
Después del sismo del 19 de septiembre de 1985, surgieron líderes sociales que se convirtieron en políticos, que todavía están activos en el PRD y en Morena, son políticos oportunistas que impiden la participación ciudadana, medraron de la desgracia de miles de familias desde hace 32 años, están involucrados en escándalos de corrupción y violencia.
No recorrían los lugares de la tragedia, solo por vía aérea, como si estuviéramos en guerra, no recorrían las calles, solo en sus cuarteles de guerra, en sus búnkers encerrados en sus trabajos de gabinete, sin reconocer la situación real de los hechos, alimentándose de los medios de comunicación masiva, la comunicación en redes y en sus cámaras.
De acuerdo con esta realidad, construían su verdad, que reproducían los medios de comunicación, en lugar de estar cerca de la sociedad, de los rescatistas ciudadanos, por ello, son mirados con desprecio.
Utilizan los medios masivos de comunicación que no son inocentes sino cómplices de un gobierno corrupto y asesino, es el caso de empresarios que también utilizan esta tragedia para beneficiarse, como es Teletón, que inundan de anuncios publicitarios para hacerse de recursos y mejorar su imagen deteriorada.
Se montan en la tragedia de un pueblo en desgracia, noble, solidario y trabajador; es el lavado de cerebro, manipular en el actuar y decidir; no vemos fuera del cristal, más allá del cristal, ni en otro lado, solo vemos lo que indican los medios de comunicación, por ello, los medios de comunicación masiva armaron su “Show de Truman”.
Conforme pasen los días conoceremos más hechos que nos sorprenderán, que todavía permanecen ocultos de la tragedia, que reflejaran la ineptitud, ineficacia, ineficiencia de la administración federal y local en las labores de rescate.
Vendrá otra rapiña en la donación de recursos materiales y financieros, están en la calle 90 mil funcionarios públicos: ya están planeando cómo llevarse los recursos; financiarán viviendas (190 mil aproximadamente) de muy baja calidad a precios exorbitantes; los bancos acumularán los depósitos sin saber después su paradero, ¿Cuál cobro de seguros?, si existía seguro de edificación de muebles e inmuebles, ahora no existe por la corrupción que existe entre las autoridades centrales y delegacionales de la Ciudad de México.
Los órganos civiles que se organizaron y tomaron el control, se replegaron ante la decisión del gobierno federal, local y municipal de sacar al ejército a las calles y ellos tomaran el control, como si estuviéramos en estado de guerra. Recuerden que el Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas es el jefe del Poder Ejecutivo.
Manejan a la perfección los sentimientos de las víctimas con engaños y mentiras, con apoyo de los medios de comunicación juegan con los sentimientos con una retórica emocional y realizan eventos masivos musicales para superar el duelo social.
*Octavio Aristeo López es profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, Universidad Nacional Autónoma de México.
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