- Publicidad -
miércoles, mayo 14, 2025

¿Renunciará el jefe del Poder Ejecutivo?

Al jefe del Poder Ejecutivo le llegó un tsunami o maremoto político en México, complejo extraordinario que causó incredulidad y asombro: la llegada de Donald Trump a México dañó la figura presidencial, el Cuarto Informe de Gobierno es severamente cuestionado, el Estado de Derecho debilitado por la constante violación de los derechos humanos, el aumento de la gasolina y la energía eléctrica provocará aumento de precios. Esto ocasiona que diversas voces pidan la renuncia del Jefe del Poder Ejecutivo.

Hasta el Presidente sabe, tiene conocimiento, está enterado, convencido, tiene conciencia que el país está polarizado y que es urgente instrumentar mecanismos de diálogo, abrir espacios a la crítica, alentar el espíritu crítico, independiente, recoger propuestas para realizar una nueva agenda, para transformar a México a un futuro mejor y conservarse en el poder.

Por lo que no hay duda para estas voces sobre la entrega del país del actual Jefe del Poder Ejecutivo a los Estados Unidos, por ello, se le considera traidor al Presidente, porque traiciona al pueblo mexicano y los principios de la Constitución mexicana.

Sentencia el Artículo 39. “La soberanía nacional reside esencial y originariamente en el pueblo. Todo poder público dimana del pueblo y se instituye para beneficio de éste. El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno.”

Entonces, el pueblo es el soberano, en él reside el origen y la esencia de la soberanía; ésta soberanía, señala el Artículo 41. “El pueblo ejerce su soberanía por medio de los Poderes de la Unión”.

Uno de esos poderes es el Jefe del Poder Ejecutivo, que debe beneficiar a su pueblo, en caso contrario lo está traicionando.

Afirma el Artículo 80. Se deposita el ejercicio del Supremo Poder Ejecutivo de la Unión en un solo individuo, que se denominará “Presidente de los Estados Unidos Mexicanos.”

Manifiesta el Artículo 87. “El Presidente, al tomar posesión de su cargo, prestará ante el Congreso de la Unión o ante la Comisión Permanente, en los recesos de aquél, la siguiente protesta: ‘Protesto guardar y hacer guardar la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y las leyes que de ella emanen, y desempeñar leal y patrióticamente el cargo de Presidente de la República que el pueblo me ha conferido, mirando en todo por el bien y prosperidad de la Unión; y si así no lo hiciere que la Nación me lo demande’.” Por eso demandan la renuncia del jefe del Poder Ejecutivo.

Donald Trump redujo 2 a 3 puntos la ventaja de Hilary Clinton, al venir a México. Trump es racista e indigno, es un enemigo amenazante para los mexicanos, ridiculiza e insulta a la nación mexicana y al propio Jefe del Poder Ejecutivo, que representa la figura presidencial. Por lo que con esta acción el Mandatario afecta la soberanía nacional, a Trump lo recibió como Jefe de Estado en México, es decir, es una muestra clara que México ya es una colonia más de los Estados Unidos y nuestro Jefe del Poder Ejecutivo, es solo un gobernador más.

La nación, el pueblo, está demandando su renuncia, al no cumplir con los principios de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. En algunas partes del país, Colima y Aguascalientes, la Bandera Nacional la colocan al revés.

Conforme al artículo 86 y artículo 108 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, el jefe del Poder Ejecutivo debe renunciar a su cargo por faltas graves a la Nación y traición a la Patria, debido a sus múltiples escándalos de corrupción, inseguridad, política económica, política exterior, violación constante a los Derechos Humanos y múltiples decisiones incorrectas en perjuicio de todos los mexicanos.

Sentencia el Artículo 86. “El cargo de Presidente de la República sólo es renunciable por causa grave, que calificará el Congreso de la Unión, ante el que se presentará la renuncia”. Y el Artículo 108. “El Presidente de la República, durante el tiempo de su encargo, sólo podrá ser acusado por traición a la patria y delitos graves del orden común.”

El Poder Legislativo, el Congreso de la Unión, como parte de los Poderes de la Unión, debe calificar de causa grave las actitudes de Presidente de la Republica, al invitar a Trump no está a la altura de las circunstancias, ni Donald Trump ni el Jefe del Poder Ejecutivo mexicano, dice: “sería un gran honor entrevistarme con usted”; es indigno su actuar, porque no está en sus cabales, está confundido, no es de confiar ni de fiar. Por supuesto, Hilary Clinton no se queda atrás, ella y su equipo redactaron la reforma energética en México.

A pesar de que la 63 Legislatura del Congreso de la Unión inicia el periodo de sesiones con escándalos y pugnas internas de los partidos políticos, ante la mirada melancólica de las mexicanas y los mexicanos, tristes y con miedo, el ánimo está decayendo en la sociedad.

Por ello, el Poder Legislativo debe realizar un pronunciamiento como representantes del Pueblo mexicano y dejar en claro que existe división de poderes en nuestro país. Que está separado del Poder Ejecutivo; el Poder Legislativo debe hacer respetar la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos, es el momento histórico para recuperar la dignidad del Pueblo, ante los graves errores metodólogos del Jefe del Poder Ejecutivo mexicano, que es siervo de los intereses norteamericanos.

La soberanía del pueblo mexicano está en duda y la figura presidencial está siendo pisoteada por el actual jefe del Poder Ejecutivo, por cometer errores metodológicos al gobernar. El gobernante gobierna a su pueblo, sin pueblo a quien se gobierna, y el pueblo es soberano. El pueblo mexicano debe recuperar su dignidad.

Además, estamos en medio de una crisis económica, crecimiento de una deuda impagable, crisis del estado de Derecho en México, crecimiento de la pobreza, el presupuesto destinado a servicios sociales es para los bolsillos de corruptos que están en el sector público y privado e inician grupos religiosos de México marchas contra el matrimonio gay.

El Jefe del Poder Ejecutivo no tiene dignidad ni honestidad, no tiene la capacidad de gobernar. Es una amenaza para el propio Estado, esto es grave y esto nos llevará a una profunda crisis gubernamental en los próximos meses.

Ya el ritual ante la figura presidencial cambió, ante la polarización social existe una cultura política que ya no acepta una comunicación política ineficiente personalista, centralista en torno al jefe del Poder Ejecutivo; si cambia el modelo económico cambia la cultura política y los formatos, fondo es forma, es el despertar de la sociedad.

Por lo que existe una nueva forma de hacer política, que exige la renuncia del Jefe del Poder Ejecutivo.

 

Profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales,
Universidad Nacional Autónoma de México.
oaristeolopez@gmail.com

Octavio Aristeo López
Octavio Aristeo López
Profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, Universidad Nacional Autónoma de México. Correo electrónico: oaristeolopez@gmail.com

ÚLTIMAS NOTICIAS

ÚLTIMAS NOTICIAS

LO MÁS LEÍDO