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sábado, abril 27, 2024

Voz profética

La clase política está cómoda, mientras los empresarios e iglesia están en movimiento preocupados por la situación actual del país y que la clase política actual siga gobernando; gobernar no es saquear los recursos públicos y utilizarlos para que un candidato sea favorecido con la compra del voto en un pueblo donde existen más de 60 millones de pobres.

El gobierno actual ya no tiene control sobre los recursos públicos ante las ambiciones económicas y financieras de la clase política que compra los cargos públicos, se olvida del bien común, ahogando a la sociedad en la mentira y calumnia y erigiendo al ciudadano como enemigo público número uno, hasta asesinar a empresarios.

“Gobierno maligno” que miente, calumnia y asesina, es el caso del gobernador de Morelos, que tiene de enemigo a la jerarquía eclesiástica, a Televisa y sus futbolistas; “políticos iluminados” que cobran del 30 al 40 por ciento de comisión por obra pública autorizada; es un negocio hacer política al dedicarse al lavado de dinero.

El PRD cavó su propia tumba al alejarse del pueblo, igual que el PRI; el PAN, apoyado por la alta burocracia eclesiástica y la elite militar, están retomando el escenario político de la época histórica de México, de mediados del siglo XIX y que fueron derrotados en la Guerra de Reforma la cual  aconteció de 1858 a 1861.

Entonces, la prioridad del PAN y del PRD es el PRI, juntos derrotar al PRI, con apoyo del Jefe del Poder Ejecutivo, es la guerra en las zonas territoriales electorales y la pasarela de músculos.

Por ello es una falsedad, en estos momentos, que el Jefe del Poder Ejecutivo es del PRI, el Jefe del Poder Ejecutivo ejecuta a todos.

Observemos, el Congreso de la Unión es un lugar donde algunos políticos delincuentes buscan fuero y construyen organizaciones políticas como empresas para conseguirse fuero, inmunidad constitucional que fomenta la impunidad: es una tiranía, alejada de la sociedad mexicana, es un lugar no confiable ni factor de fortalecer a la sociedad al hacer uso indiscriminado de los recursos públicos, algunos consideran que es un nido de delincuentes.

Es un lugar donde circula mucho dinero entre los integrantes del Congreso de la Unión quienes representan el Poder Legislativo, los cuales dejaron de ser representantes de la sociedad mexicana. Tienen mucha pasión y amor por el dinero más no al país; por ello, cada voto es una inversión que recuperan cuando manejen el presupuesto público para sus proyectos personales, no sociales; no toleran a la sociedad, esta clase política empresarial, tampoco la gente los tolera, viven en una realidad política virtual llena de simulación e intolerancia y toman decisiones erróneas que ponen en peligro la vida social e individual, ahí están las fosas clandestinas por todo el país, muertos aclamando justicia y reclamando su muerte.

Siguen los asesinatos en las entidades que gobierna el PRD: Michoacán, existen más de 35 asesinatos de mujeres en 2017, algunos consideran que son femenicidios, la violación de los derechos humanos es permanente, en Morelos asesinan hasta a empresarios, el descubrimiento de nuevas fosas clandestinas. Corruptos y asesinos gobiernan.

Es la barbarie insensible cuando no respetan la cultura de una sociedad ni la constitución, en donde el Poder Judicial vende amparos a los delincuentes, los jueces son cómplices de ellos, obstaculizan la justicia y están al servicio del dinero.

Estoy de acuerdo, son necesarios los partidos políticos, son útiles al Estado como instituciones públicas; pero los actuales dirigentes y líderes de los partidos políticos no son necesarios, son desechables, ya no deben reciclarse, deben estar fuera del gobierno; con sus decisiones erróneas dañan al país, pelean por los recursos públicos no por el bienestar social, no son críticos ni autocríticos; deben estar fuera del gobierno y dedicarse a la usura dentro del manejo de empresas privadas y no manejar el gobierno como una empresa privada, porque un bien público no es un bien privado.

Los propios dirigentes y líderes de los partidos políticos, manejan los cuantiosos recursos públicos para garantizar lealtades y la unidad, viven y actúan en torno al dinero y privilegios; trabajan en contra del bienestar social cuando observan estar en peligro sus intereses particulares, se desvían de la ruta, del camino, según su ambición. Sus embestidas políticas los convierten en actores sanguinarios, en un drama trágico de acusaciones y señalamientos que hacen publica, porque la vida política es pública.

Es el desgaste político, en sus rutas diferentes, izquierda o derecha, ambos caminos llegan al centro, allí coalicionan. Es el camino de corrupción y impunidad, caminan juntos la arbitrariedad y el abuso de poder.

Por ello, el país no cambiará con esfuerzos personales de algunos, debe existir unidad, una fuerza política vinculada a los ciudadanos, promotora de los movimientos sociales para avanzar a un mejor estadio político que le corresponde a la sociedad.

No vender el voto por un puñado dinero, porque están vendiendo su libertad y su prosperidad, están vendiendo su vida a un proyecto de muerte y sufrimiento. Es nadar de a muertito, ante la amenaza de muerte.

En las elecciones de Nayarit, Coahuila, Veracruz (elecciones de presidente municipales) y Estado de México, los políticos que participan, algunos, tienen vínculos con el crimen organizado (ejemplo claro los recientes acontecimientos en Nayarit, Veracruz y Tamaulipas, con apoyo del gobierno federal), construyen organizaciones políticas y organizaciones civiles, invierten dinero en ellas para seguir robando del presupuesto público, hacen negocio de la política; son ladrones que roban la felicidad y el futuro de un pueblo.

Esto son los que no quieren dejar el poder, compran votos con dinero del crimen organizado y del presupuesto federal, destinado a servicios públicos.

Por supuesto, los militares están molestos. La sociedad civil organizada está indignada de una clase política gobernante cómplice con el crimen organizado, la cual está muy cómoda y da festines insultantes en el sacrifico ritual de los muertos en México; dolor, sacrificio, tortura, vejaciones, es una danza de la barbarie en un Pacto cubierto de muertos y sangre, es historia de abuso criminal e impunidad en México.

No tienen una cruz, solo el control de un Jefe del Poder Ejecutivo enfermo sobre las instituciones que utiliza al Ejército para reprimir y asesinar, como prueba pública están los asesinatos que son crímenes de lesa humanidad y las fosas clandestinas llenas de cadáveres; además, de dividir al país y desprestigiar a soldados y marinos de las fuerzas armadas, alejarlo del pueblo que debe proteger y cuidar su soberanía.

Los consejeros electorales del INE actúan como parte de la delincuencia organizada al reciclar a la clase política gobernante corrupta y asesina; por ello, existen anormalidades administrativas y políticas, que son cómplices en el robo de recursos públicos y asesinar a ciudadanos desarmados.

No existe control de los grupos criminales porque son parte de la clase gobernante, ante tal abuso de autoridad no son estadistas, son asesinos, cuestionados por la comunidad internacional.

El malestar social es enorme, es la mayoría democrática que busca recomponer el destino del país, es la que triunfará en el cambio, ya que no hay casualidad en política solo corrupción en el engranaje del círculo político.

Los vicios deben acabar. El voto de castigo se espera como en junio de 2016, es rescatar la dignidad del pueblo mexicano, apreciado por propios y extraños. Voz de profeta.

 

*Octavio Aristeo López es profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, Universidad Nacional Autónoma de México.
Correo electrónico: oaristeolopez@gmail.com
Twitter: @oaristeo

Octavio Aristeo López
Octavio Aristeo López
Profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, Universidad Nacional Autónoma de México. Correo electrónico: oaristeolopez@gmail.com

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