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viernes, marzo 29, 2024

Cosas buenas que parecen malas

El alcalde leonés Ricardo Sheffield armó una polémica con su partido cuando decidió vender en cómodas mensualidades al PRI un terreno de propiedad municipal. Había el antecedente de que el comité municipal blanquiazul había adquirido su propio predio y edifica nuevas oficinas a su costo.

Ahora, se ha convertido en tema de la agenda pública la falta de claridad sobre las condiciones de la contraprestación entre alcaldía y comité priista, a grado tal que ya empezaron las suspicacias.

Y algunas son radicales, como la que supone que la graciosa concesión se habría allanado aún más después de que los regidores priistas depusieran a su coordinador, José Arturo Sánchez Castellanos, harto incómodo para la mayoría panista.

Aunque insidiosa, esa especulación por lo menos explica el súbito amor entre el dirigente priista Luis Gerardo Gutiérrez Chico y el regidor barbarista Salvador Ramírez Argote, después de que no podían ni verse. Y recuerden que, en política, lo que parece, es.

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