- Publicidad -
jueves, abril 25, 2024

Caja Negra/16 de septiembre

LOS PODEROSOS AMIGOS

Queda claro que lo que menos importó fue la transparencia. Al magistrado del Poder Judicial del Estado de Guanajuato, Eduardo Hernández Barrón, no importó que los días de su ausencia haya dejado pendientes en su oficina sin que, al menos un interino, los atienda.

Eduardo Hernández Barrón es toda una historia de éxitos. Su carrera más reciente lo depositó del Tribunal Electoral del Estado de Guanajuato al Instituto de Acceso a la Información Pública donde, por cierto, no se cansó de repetir a diestra y siniestra que su proyecto de vida era ser nombrado magistrado del Poder Judicial del Estado de Guanajuato. Y así fue.

El miércoles pasado Hernández Barrón fue electo como magistrado con 28 votos, sus competidores fueron testimoniales y para dar trámite: Vicente Vázquez Bustos y Joel Hernández Domínguez, los tres propuestos por el gobernador.

Pero el dedo de la aplanadora panista se dirigió al transparentólogo quien, por cierto, hasta ese momento dejó de despachar en el IACIP pese a que su firma debe ir al calce en cada uno de los recursos de apelación que requieren los trámites de transparencia, es decir, si cualquier ciudadano requería de un trámite con la firma del director del IACIP, tendrá que esperar a que llegue un interino.

No sólo eso, su carácter de responsable administrativo, recae también en su firma los pagos y seguimientos de carácter administrativos por lo que –al menos en eso confían- el lunes a primera hora se haya nombrado al próximo director del IACIP, si es que la transparencia no es sólo un discurso, pues la nueva ley entra en vigor hasta enero del próximo año.

Pero más allá del garlito administrativo que deja –por unos días- Hernández Barrón al renunciar al IACIP para enfundarse la toga de magistrado, cuyas canonjías los equiparan a un pequeño principado que gozan de las mieles del presupuesto estatal, se nota la mano de un potentado que lo protege, lo acompaña, lo premia, y le cumplió el sueño que tanto anheló.

¿Quién?. Si bien fue el  gobernador Héctor López Santillana quien nombró una terna simulada para favorecer a Hernández Barrón, no queda sino cuestionar si él buscó someter a su sucesor para proteger al ex director del IACIP mediante una maniobra que desnuda el discurso de transparencia del propio Miguel Márquez Márquez.

No queda más que buscar entre el poder fáctico desde donde se le envía un mensaje al próximo mandatario. El protegido del sexenio que termina, fue depositado en la Segunda Sala del Poder Judicial pese a que su historia pública se resuma en dos hechos:

Un cobro por 1.7 millones de pesos tras su renuncia del Tribunal Electoral, de los que medio millón no le correspondían ya que renunció y, aún así nunca los devolvió, y la compra de botellas de tequila por 200 mil pesos para una reunión a la que, con todo gusto, convidó a sus allegados.

Hoy,  pese a la rota relación con su consejo en el IACIP, a que no logró poner en orden su dependencia, a las dudas en el colectivo guanajuatense y al argumento que esgrimió al llegar al Congreso de Guanajuato de que no tenía “ni la más peregrina idea” de su nombramiento, Hernández Barrón es magistrado.

La duda esta vez no es si el ex director del IACIP renunciará a su liquidación o no, la duda es: ¿quién usó al magistrado para demostrar que hay un poder superior a Miguel Márquez y, de una vez por todas, someterlo antes de tiempo?.

LA NUEVA COFRADÍA EN LEÓN

Hay una serie de personajes que comienzan a rondar el entorno de la alcaldesa electa Bárbara Botello Santibañez cuyo común denominador son los negocios que lograron en la administración de Ricardo Sheffield y la búsqueda de poder.

Sus nombres ocupan la más alta expectativa en ciertos círculos que se posicionan desde el cero doce con la intención de transitar por tres años. ¿Cuál es el interés que, por encima de un funcionario de Seguridad Pública se baraje el nombre del próximo tesorero municipal?.  De ahí se desprende un todo.

Roberto Pesquera Vargas ya trabaja en los próximos proyectos en calidad de futuro tesorero en tanto que Ignacio Ramírez Sánchez inicia su campaña por ser presidente consejero del Instituto Municipal de Planeación. Dos puntos clave.

Por cierto, en el consejo del Implan se aprobó un asiento para Miguel Gómez Orozco, hermano de uno de los accionistas del proyecto La Primavera cuyo freno estuvo desde ese instituto al cual llega y se reúne con Ignacio Ramírez.

Y más allá. En el terreno de la Obra Pública y el Desarrollo Social, ya comienzan a darse nombres de quienes estarían firmando, pactando, ordenando y definiendo. Uno de ellos es Germán Martínez, yerno del ex candidato al gobierno estatal Juan Ignacio Torres Landa.

Se afinan también otras estrategias desde ese grupo compacto de la alcaldesa, en materia de publicidad, promoción y mensajes, parte de la nueva cofradía que asumirá el poder en octubre próximo.

Hasta ahora, y pese a que en su documento de campaña Los Temas de la Gente la alcaldesa marcó como prioridades inseguridad, desempleo, pobreza y gobierno ineficiente, son temas de los que poco se habla, o se refieren de manera muy somera.

La nueva cofradía del barbarismo, esta vez no salió del PRI, sino del sheffieldismo.

POST DATA

  • El PVEM que le abrió las puertas y la alcaldesa Bárbara Botello que se las cierra, se complica el panorama para el partido que la cobijó.
  • Un sindicato blanco, un charro y uno panista, entre esa burocracia llegará el próximo gobierno leonés.
  • En los gobiernos municipales ya bajaron la cortina, total, ya se van no sin antes ensayar todos los días la carrera a la meta “una, dos y tres: este es el año de Hidalgo y ………………………………………………………………………….……” (favor de llenar con letra de molde)

 

 

ÚLTIMAS NOTICIAS

ÚLTIMAS NOTICIAS

LO MÁS LEÍDO