Un menor con un brazo fracturado, una pareja recibiendo atención hospitalaria, además de varios sustos por fallas en los juegos mecánicos, son algunos de los “incidentes” registrados durante esta edición de la Feria Estatal de León 2025.
Alonso Limón Rode, director general de la Feria de León desestimó uno a uno estos “incidentes”, señalando que “son normales y por fortuna no han pasado a mayores”. Esa declaración, más que leerse creíble, resulta ser poco empática con los afectados, que han tenido que pasar desde sustos hasta lesiones físicas que sí pudieron haber comprometido su vida.
Los accidentes pueden ocurrir, sobre todo en eventos tan multitudinarios como la Feria, sin embargo, son hechos que en su mayoría pueden prevenirse, si es que se hubieran tomado a consideración medidas de seguridad.
Por ejemplo, la cabeza de ganado no tendría que haberse escapado del corral y corretear por la zona de comida, lesionando a un niño. Y en el juego Titán, nadie tendría que haber gritado por auxilio si se hubiera ajustado correctamente el cinturón de seguridad de quienes suben a esa atracción.
Si bien, la Feria ha dado de qué hablar por sus grandes espectáculos como el concierto de Sam Smith y Def Leppard, que han logrado romper récords de asistencia en León; también hay que reconocer que han existido distintas inconformidades y accidentes en el recinto ferial.
Estos accidentes no pueden seguir ocurriendo y muchos menos normalizándose. Sería una pena que un hecho “que sí pase a mayores” pudiera empañar por completo los éxitos que según el Patronato de la Feria, ha ido anotándose esta edición 2025.
El triste día de Alatriste
Gerardo Vázquez Alatriste, quien ha coqueteado con el rumor de que se trata del candidato que reúne los consensos federal y estatal, para ser el próximo fiscal general del Estado, ayer dió el “zamarripazo”.
Con la soberbia que caracterizaba al anterior fiscal, si no es que con una actitud peor, Vázquez Alatriste compareció ante los y las diputadas locales para exponer lo que sería su proyecto.
Seguramente el todavía delegado de la FGR en el Estado creyó que iba a un mero trámite, y tal vez tenía razón, Sin embargo, el abogado y activista, Roberto Saucedo lo interpeló, y a partir de ese momento Gerardo Vázquez mostró su peor talante.
Sus respuestas se convirtieron en acusaciones y señalamientos personales a Saucedo y su familia, sobre cuestiones que habían sido resueltas, no sólo de manera definitiva y desde hace bastante tiempo en favor de Saucedo Pimentel y los familiares que se vieron involucrados.
Luego, ante el intento de réplica de Roberto Saucedo, el candidato a fiscal optó por aquella actitud que tanto se le reclamó a Carlos Zamarripa, hacer de cuenta que ni oí, ni veía nada.
Es muy probable que a pesar de lo mostrado hoy por Vázquez Alatriste, siga siendo el aspirante favorito, sin embargo, si el Congreso lo elige, mandará el mensaje de que nada ha cambiado con la salida de Zamarripa, y que nada cambiará con la llegada de Gerardo Vázquez.