En Guanajuato han fallecido más de 30 menores de edad, incluyendo bebés e infantes menores a los 10 años por COVID-19.
La realidad es desalentadora, considerando que los infantes son un grupo de riesgo que tiene menos posibilidad de contraer la enfermedad, pero que al final se ha visto perjudicado también.
Ahora Guanajuato ocupa el segundo lugar a nivel nacional con más contagios registrados de coronavirus en menores de edad.
Sin duda el resultado de la relajación de medidas sanitarias y de la irresponsabilidad de los padres de familia por no acatarlas con sus hijos es el reflejo de que ahora, Guanajuato este en este lastimoso lugar.
El Día del Niño no será el mismo una vez más.
El contexto del COVID -19 sigue siendo doloroso y crudo; aún no está controlado y dista mucho de la que la vida regrese a la normalidad.
Celebremos el Día del Niño, pero hagámoslo con responsabilidad.
Apoyos en suspenso
Junto con la pandemia llegó un fuerte freno a la economía nacional.
En Guanajuato, el Estado decidió salir al rescate de las empresas con apoyos económicos para que pudieran sortear la crisis.
Se diseñaron líneas de crédito bajo esquemas que aseguraran las condiciones de pago; sin embargo la pandemia ha durado más de lo que se pensaba y por tanto la recuperación de las empresas ha sido muy lenta.
En esas condiciones, algunas de las empresas han empezado a solicitar la posibilidad de posponer sus pagos o de ampliar sus líneas de crédito.
Si bien el gobierno ha abierto la posibilidad de establecer una suerte de revolvencia de lo prestado y con ello generar más apoyos, el problema parece enredarse con las empresas que no están en condiciones de pagar, al menos en este momento.
Más allá de que cada una de las empresas haya establecido garantías de pago, cobrar a partir de ellas limita enormemente los apoyos y pone en severo riesgo una eventual segunda etapa.
