Es de pensarse que por la vía independiente alguien levante la mano para encabezar la administración de Salamanca, municipio que camina rumbo a un pueblo fantasma, tras la ola de inseguridad que se refleja con homicidios dolosos y extorsiones.
Problemas que no son minúsculos, pues han motivado a que los salmantinos, tratándose específicamente comerciantes, huyan, dejando atrás su patrimonio.
Un ciudadano, un líder social, lo pensaría, una, dos, tres veces, quizá, diez.
Se avecinan las elecciones, y dos personas no han dicho ‘yo’, pero tienen la mano bien alzada, no una, son dos.
Por un lado, José Manuel Cabrera Sixto, exrector de la Universidad de Guanajuato, y de muy malos recuerdos en la Casa de Estudios por las persecuciones que llevó a cabo y los dudosos manejos financieros de su administración, por decir solo algunos de los señalamientos que pesan sobre él.
Precisamente por eso es que su nombre se une al de la alcaldesa Beatriz Hernandez en la necesidad de auditorías a sus encargos.
Sí, el exrector fue señalado por irregularidades en el manejo de los recursos durante el 2012, según el Órgano de Fiscalización Superior, lo que se hizo público en el 2015, y su respuesta fue una serie de argumentos, cuyas diferencias son mínimas si los comparamos con los de la munícipe, después de las observaciones de la ASEG por la compra de luminarias.
En una fallida cátedra, culpó a los medios de comunicación.
Ahora bien, Cabrera Sixto, es concuño del exalcalde salmantino Genaro Carreño Muro, quién es tío de nuestro segundo participante, Juan Carlos González Muro, ¿casualidad, coincidencia? Sinceramente no lo sabemos.
Lo que si sabemos, es que Juan Carlos González Muro, llegó a la regiduría por Morena y es tan afín a Beatriz Hernández, que de ahí su padre, también, exalcalde de Salamanca fue nombrado secretario del Consejo de CMAPAS y según los allegados, sus hermanos asumen cargos en la administración.
En las primeras sesiones de Ayuntamiento, el edil solo levantaba la mano para votar a favor de Hernández Cruz, habrá que reconocerle que en días recientes, trata de mediar entre ambos bandos del Ayuntamiento, es decir, los regidores de oposición y la alcaldesa.
Pero, nos seguimos preguntando: ¿casualidad o coincidencia?, tal vez destino, o una serie de eventos desafortunados, pues Salamanca pareciera ser visto como una mina de oro, mientras que sus ciudadanos claman un cambio de rumbo, lejos de un pueblo fantasma y del oportunismo de Cabrera Sixto.
Economía y Seguridad, la preocupación del leonés
Este martes se presentó la Encuesta de Victimización y percepción de inseguridad en el municipio de León (Envipe) 2020, donde por primera ocasión se hizo bajo un magno evento con presencia de autoridades municipales y estatales, además de funcionarios conectados de manera virtual.
La probable intención para realizar un largo discurso para presumir los resultados en materia de seguridad de la Secretaría de Seguridad Pública de León (SSPL) es porque la ciudadanía no calificó muy bien la percepción de seguridad en la ciudad.
No es novedad que la mayoría de los 1 mil 800 leoneses encuestados respondan que se sienten inseguros en su ciudad y colonia, pero lo que sí es nuevo es que además de manifestar como un problema personal y familiar la seguridad, ahora también se sumó la parte económica que aumentó a un 39 por ciento, mientras que la inseguridad fue del 20 por ciento. Seguramente una manifestación de los estragos que la pandemia está causando en la economía personal.
Francisco Abundiz, director asociado de la empresa encargada en levantar las encuestas, Parametría, aludió que la percepción de inseguridad en la ciudad es generada por los medios de comunicación que publican noticias relativas a estos temas.
Más allá de las cifras que presuntamente son consultables para toda la ciudadanía, es preocupante que la inseguridad se aluda a un tema de medios de comunicación, en lugar de asumir la realidad.
Lo medios publicamos las noticias, no las hacemos, ni las inventamos. La realidad está en cada calle, en cada colonia, en cada muerte que ocurre. Pensarnos como causa de esa percepción es sumamente grave.
Si bien la economía fue otro tema a destacar, no se ahondó en este punto debido a que es una encuesta focalizada a temas de seguridad, donde por cierto, los encuestados, en un 51 por ciento, afirmaron que esperan que en los próximos 12 meses la seguridad empeorará.
Las autoridades municipales presentaron resultados con videos de testimonios de ciudadanos que han sido víctimas de algún delito y donde la policía municipal logró hacer las debidas detenciones (aunque con civiles asesinados de por medio). Sin duda ello es bueno, pero no ha resultado suficiente para cambiar esa percepción ciudadana.
En seguridad queda mucho por hacer a los gobiernos para revertir esa tendencia.
