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jueves, marzo 28, 2024

Contra los feminicidios, la tarea es permanente

El Congreso del Estado dio un paso hacia lo que parece la homologación nacional del tipo penal de feminicidio.

Que en todo el país se considere a la misma conducta como delito es un paso importante, lo será más si se va en la dirección correcta.

Ahora se tendrá que entender, desde el legislativo mismo, que la erradicación de estas conductas no termina con homologarlas, sino que en el mejor de los casos, apenas le da inicio.

Lamentablemente las políticas públicas para eliminar las agresiones a las mujeres no han avanzado, mucho menos en relación de aquellas que lamentablemente terminan con la muerte, por lo que el reto no solo continúa, sino que cobra más urgencia.

Quien crea que agregando un poco de tina en la ley ha hecho su trabajo, no solo se equivoca, sino que está dejando de hacerlo.

Pdheg y desaparecidos, un papel meramente testimonial

Si hay un tema en México que requiere de la debida atención de un ombudsman, ese es el de la desaparición de personas.

Se trata de una tragedia humanitaria señalada en foros internacionales y nacionales, estudiada y debatida en foros independientes e institucionales.

Así lo ha sido en Guanajuato, pese a la nula estadística oficial y sobre todo, a la ausencia del procurador de los Derechos Humanos de Guanajuato, Raúl Montero de Alba.

Lo que llama la atención es que pese a no ofrecer resultados, fuera de los siete casos que procedían hasta de dos años, no se ha incluido en la lucha que académicos, activistas pero sobre todo familias enteras emprendieron para visibilizar y exigir atención a los casos que la violencia disparó en Guanajuato.

El viernes pasado, Raúl Montero de Alba dijo ante diputados que “le ha dado seguimiento al tema, pero, las familias lo acusan por no proteger más que a las instituciones maquillando las cifras.

Desde hace tres semanas los colectivos de personas desaparecidas se han se manifestado en Irapuato y León desde principios de junio, para denunciar las semanas acumuladas únicamente para tener, al menos, la contestación de sus quejas o si se le ha dado seguimiento. Todo mientras buscan a su ser querido.

La Procuraduría de los Derechos Humanos del Estado de Guanajuato no abona para que se atienda el tema. Al contrario, se ha convertido en un organismo testimonial frente a la problemática, pero lo que es peor, es inoperante al atenderla.

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