Las condiciones hospitalarias de Guanajuato, pese a que se saben como una de las mejores en el país, tras el continuo incremento de casos positivos de COVID-19, abren una pregunta: ¿La capacidad hospitalaria podría verse rebasada?
En Guanajuato, el 54 por ciento de las camas se encuentran ocupadas por pacientes de coronavirus, un crecimiento considerable a lo que se presumió cuando estaba al 12 por ciento meses atrás.
Hoy el incremento de casos positivos por este virus, no solo afecta a los sectores económicos y a la misma sociedad, sino a los propios trabajadores de la salud, pues estos también representan un número alto de contagios en la entidad.
El incremento de pacientes de COVID-19 en el estado, en suma al número de personal médico que se contagia deja un escenario desalentador para el sistema de salud estatal, pues podría hacerse realidad el temor de la Secretaría de Salud, y entonces aquello que tanto se presumió podría verse superado por este mal.
Para que ello no suceda es urgente que los casos de contagio en el estado bajen, y que la gente acaté las recomendaciones sanitarias, de lo contrario el espacio en los hospitales cada vez se verá más reducido.
Israel critica, pero poco aporta
El problema de la contaminación en Salamanca lleva años sin que realmente existan acciones que de verdad la atiendan, pero cuando parece que al fin se tomarán cartas en el asunto, no falta quien critique y poco aporte.
Recientemente se dio a conocer que se pretende reactivar el Plan Salamanca, con el que se busca reducir la contaminación del aire en ese municipio, en el proyecto está la Secretaría de Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial y la administración municipal de Salamanca.
Según el plan se generará comunicación con personal de RIAMA y con la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) y se fortalecerán los protocolos de prevención, veremos si se concreta.
Pero como ya lo dijimos antes, no falta quien critique y en este caso, irónicamente fue el diputado local del Verde, Israel Cabrera Barrón quien dijo que la reactivación del proyecto llega tarde y además no hay participación ciudadana.
En cierto sentido tendría razón el diputado, pero hay que recordar que de 2013 a 2018, fungió como delegado de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), y a pesar de ésto nunca hizo nada para erradicar la problemática en Salamanca.
En ese lapso, en realidad pocas fueron las acciones de Israel Cabrera en materia ambiental en Guanajuato, pero ahora que ya no está en cargo y es diputado, se pone a criticar sin además formular alguna propuesta que abone a la mejora del medio ambiente.
Además hay que señalar que Cabrera Barrón es el presidente de la Comisión de Medio Ambiente en el Congreso, desde donde se deberían estar generando políticas públicas para atender estos temas, cosa que lamentablemente no ha sucedido, fiel al desinterés que tuvo en su desempeño en la Semarnat.
Como sea, parece que el diputado Cabrera sigue siendo de aquellos políticos que tiene un problema para cada solución.
