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jueves, marzo 28, 2024

La Feria de León ¿en agosto?

A veces es preferible cancelar, que posponer.

Estar posponiendo la decisión sobre la realización o no de la Feria Estatal, no es un buen mensaje para nadie.

Los comerciantes que esperan reactivar en algo sus actividades con ello, siguen a la espera y en la indefinición más absoluta, sin certeza alguna.

Si ahora se pretende, como lo dijo el diputado Éctor Jaime Ramírez Barba, por cierto. convertido en vocero de un Juan Carlos Muñoz inaccesible y escondido en los rincones del recinto ferial o de su empresa, postergar la decisión para el segundo semestre del año, siempre y cuando se avance en el proceso de vacunación, entonces la espera se alarga y la incertidumbre crece.

Pero puesto así, como lo condiciona Éctor Jaime, no pareciera que lo que importa sea la Feria, sino buscar un pretexto para su cancelación, y que se le pueda cobrar al gobierno federal.

Dicho de otra manera, lo que pretende El Castor, en voz del diputado Ramírez Barba es decir que si la Feria no se hace es porque el gobierno federal no cumplió con vacunar al porcentaje de la población que se comprometió.

Lo cierto es que asumiendo la decisión con la responsabilidad que se debe, El Castor o su diputado vocero deberían reconocer que no hay, ni habrá condiciones para concentrar a las decenas de miles de personas que se reúnen diariamente en la Feria.

Lo extraño es que haya sido Ramírez Barba el que haya salido a posteragar la fecha y a crear un culpable, haciéndole el favor a El Castor que sigue empecinado en el evento y sin dar la cara.

¿No sería mejor cancelarla y que el diputado Éctor Jaime buscará o tramitará apoyos para los sectores económicos que resulten vulnerados con ello?

Seguramente, pero eso no está en la lógica social ni El Castor, ni de Ramírez Barba.

El desaire de Morena

Algunos de los grupos de Morena habrían convencido a Carmen Cano, una notable investigadora y exlideresa del sindicato académico de la Universidad de Guanajuato, de ir por la candidatura a la Presidencia Municipal de la capital.

Cano Canchola no solo es una académica reconocida, sino una activista que se ha involucrado en las causas más relevantes de la comunidad cuevanense.

Con Carmen Cano parecía que Morena mandaba el mensaje de que iba en serio por la capital, con alguien que además se ha formado en la verdadera lucha de la izquierda mexicana. Sin embargo todo se desmoronó a la hora que la nomenclatura morenista, sobre todo la de Ricardo Sheffield, se dio cuenta que estaban desplazando a Roberto Loya, su preferido; y de que Óscar Aguayo reclamara que Morena es para los morenistas

Finalmente, los compromisos de los neomorenistas -en realidad expanistas- volvieron a cambiar el género de la candidatura para forzar que fuera hombre quien compita por el cargo de primer edil, y con ello hacerle el desaire a un perfil ciudadano y novedoso.

No pierde Cano Canchola, pierde Morena al dejar plantada y sin explicaciones a una opción ciudadana de una brillante trayectoria.

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