Hace cerca de dos años, el gobernador del Estado anunció que destinaba 200 millones de pesos para atender el problema de las ladrilleras en León.
Todo indicaba que era el inicio de un esquema de soluciones para uno de los problemas de contaminación más graves que vive el municipio más más poblado del Estado.
Sin embargo, no fue así. Al momento de empezar a abordar el problema, la secretaria de Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial, María Isabel Ortiz Mantilla, se hizo bolas, o al menos eso ha parecido.
Sin avances sustanciales y con la proliferación diaria de cada vez más ladrilleras, cualquier diagnóstico parece rebasado y cualquier manera de abordarlo, lejana.
Sin embargo Ortiz Mantilla ahora ha aparecido solo para anunciar que próximamente habrá un nuevo anuncio sobre el tema.
Es una buena noticia que la problemática ambiental, social y económica de las ladrilleras siga en la agenda del gobernador; sin embargo lo que se necesita es que Ortiz Mantilla la integre a sus acciones.
Coordinación entre Federación, Estado y Municipios
Al parecer la coordinación entre los tres niveles de gobierno para atender el tema de la inseguridad, no está teniendo los resultados esperados.
Sí bien el gobierno del estado ha presumido que hay coordinación con la Federación, ahora el tema recae en los municipios.
Al menos así lo señaló el mismo gobernador tras los multihomicidios registrados este fin de semana al referirse que no se tiene una coordinación efectiva con todas las policías municipales.
El llamado a los poderes a redoblar esfuerzos es constante y por supuesto necesario para recuperar la paz y la seguridad que se ha perdido en los últimos años, pero…¿Dónde está fallando entonces la coordinación, si es que realmente hay? ¿O qué es lo que falta en esa coordinación?
Si bien el discurso ha cambiado un poco en cuanto echarse la bolita entre las autoridades, la ciudadanía sigue percibiendo un ambiente delictivo elevado en Guanajuato, ello incluso con tendencia a la baja que ha presumido el Estado en cuanto a los homicidios dolosos y también pese a la presencia de fuerzas como la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano.
Si es que la coordinación será la que inhibirá los asesinatos, entonces es importante que esta sí se refuerce, y no solo se quede en el reconocimiento, y por supuesto, en un discurso más de las autoridades.
