Tras cuatro días de plantón en las afueras del Teatro Juárez, en la capital del Estado, los representantes de los colectivos “A tu encuentro” y “Sembrando Comunidad” finalmente se reunieron el día de ayer con el gobernador del Estado, el secretario de Gobierno y el todavía titular de la Comisión de Búsqueda,.
Todo indica que el encuentro no fue fácil. Se dio en medio de aparentes divisiones de los colectivos generadas por familiares de desaparecidos que han acusado a José Gutiérrez, quien ha sido su representante en todo este proceso de búsquedas; y la defensa de él mismo señalando intromisiones e intenciones separar a los grupos.
A pesar de ello se puede decir que hubo algunos avances. Sin duda el más importante es el compromiso del Gobierno del Estado de revisar a detalle el proceso de nombramiento de Díaz Ezquerra, sobre lo que habrá de pronunciarse el próximo lunes.
En tanto las partes acordaron mantener el diálogo abierto y generar respuestas hoy mismo sobre otros planteamientos que ambas hicieron y que de momento no divulgaron.
Queda esperar que los acuerdos sean positivos y prontos, pues allá afuera está el horror de la urgente necesidad de continuar con la búsqueda de cada una de las personas que han desaparecido en Guanajuato.
Todos somos Celaya
Celayenses en más de mil vehículos salieron y llenaron las calles de su ciudad en medio de reclamos como: “Justicia para Andrés”, “Basta ya”, “Queremos paz en Celaya” y muchas consignas más
Hartos de la situación de violencia que prevalece en el estado, pero más específicamente en su municipio, dejaron atrás el miedo, como lo hicieron hace meses miles de estudiantes y tomaron sus calles, esas que nunca han dejado de pertenecerles pero que cada vez recorren menos o con más miedo.
Ayer los celayenses demostraron que Celaya es suya, no de las organizaciones criminales que operan en ese territorio; demostraron su hartazgo hacia ellas, a la violencia que despliegan, pero también volvieron a reclamar el actuar eficiente de la autoridad: la municipal, la estatal y la federal.
Ojalá alguien o todos les hagan caso, porque el hartazgo es de millones de personas y la violencia de unos cuantos.
