Hartos de ser ignorados por el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador en cada visita que hace al Estado, los colectivos de búsqueda de desaparecidos decidieron buscar y encontrar a AMLO.
Para ello se citaron hoy en el zócalo de la Ciudad de México, frente a Palacio Nacional, a las 7 de la mañana, justo al inicio de la mañanera del presidente.
La intención es una manifestación pacífica que visibilice no solo a estos colectivos, sino lo más importante: su causa… sus miles y miles de causas, y que se haga más, mucho más para encontrar a cada una de las personas desaparecidas.
Las convocatoria es clara “Si AMLO no va a las fosas, las fosas vienen a él”, porque hay un dato gravísimo para el gobierno de Andrés Manuel: el 80 por ciento de las desapariciones han ocurrido en su gobierno.
Así, hoy se oirán las miles de voces de cada una y cada uno de los que nos faltan, y seguramente no bastarán los muros de Palacio Nacional para que López Obrador no los oiga.
Las iniciativas de Navarro
Cómo cada año, el Ayuntamiento de Guanajuato planteó su iniciativa de Ley de Ingresos. Un ritual que hace anualmente cada municipio del país.
Más allá de las críticas a la forma de proyectar los ingresos, se trata de una obligación que el municipio debe de cumplir.
Sin embargo, la facultad de iniciar leyes el municipio de Guanajuato solo la ha ejercido para definir sus ingresos, no para cumplir sus propuestas.
Un ejemplo claro de ello son las declaraciones de Alejandro Navarro en el sentido de estar de acuerdo en que se incluyan en la ley los matrimonios igualitarios.
Podría decirse que entre el dicho y el hecho hay muchísimo trecho, porque el alcalde y su Ayuntamiento han sido incapaces de siquiera plantear la posibilidad de una iniciativa para modificar nuestro vetusto Código Civil.
Decirse un municipio incluyente y no hacer nada por cambiar la legislación que excluye, no solo es una simulación, sino una manera peor de discriminar.
