Tal parece que los leoneses desconocen las manifestaciones, su derecho a levantar la voz y a exigir a los funcionarios públicos que velen por la ciudadanía y no por sus propios intereses.
Caso contrario al de los políticos, quienes aprovechan la presencia de los medios de comunicación en temas tan sensibles para la sociedad como el aumento al transporte público para alzar la voz, darse a conocer e incluso hacer una especie de ‘perfomance’.
Un ejemplo claro fue lo sucedido este jueves durante la sesión de Ayuntamiento, donde minutos antes de que se aprobara el alza de 1 peso y de 1.50 a la tarifa del transporte, integrantes de Morena con pancartas y un megáfono ya estaban afuera de Presidencia Municipal manifestándose.
Pero esto no es todo, pues Mario Iram Hernández Muñoz, quien anteriormente participaba en reuniones de Morena cuando Andrés Manuel López Obrador (AMLO) no había llegado al poder, se encadenó a la puerta de la sala de Cabildos para protestar por el aumento al transporte.
Esta no es la primera ocasión que lo hace, pues en el 2014 cuando era perteneciente a la organización “No más Víctimas por el Fútbol”, se encadenó frente a presidencia para suspender el pago de 100 mil pesos mensuales del mantenimiento del Estadio León.
En esta ocasión, él aseguró que después de la sesión de Ayuntamiento, los policías municipales lo llevarían a disposición del Ministerio Público por impedir que se llevara a cabo la audiencia. Dicho de otro modo, llamó la atención mediática para manifestar su descontento, pero la pregunta es ¿dónde estaba cuando las mesas de trabajo de la Comisión Mixta Tarifaria se llevaron a cabo?, porque de ahí emanó la propuesta de subir un peso el transporte.
También estuvieron presentes la líder estatal de Morena, Alma Alcaraz y la senadora Antares Vázquez, quienes pidieron que el alcalde Héctor López Santillana cumpla sus promesas de campaña.
Pero no fue el único, pues también estaba el líder estatal de Movimiento Ciudadano (MC), Rodrigo González, quien luego de las campañas del año pasado no se le ha visto activo con más temas locales, salvo este que incluso lo posicionó con un hashtag y una playera que dice #NoAlOrugazo. Y por supuesto que con él estaba el excandidato de MC a la alcaldía, Daniel Malacara, quien no logró que su partido tuviera un regidor para tener representación en el Ayuntamiento.
Y a pesar que sí estuvo presente durante la Comisión Mixta Tarifaria e intentó tener un diálogo con los funcionarios, su movimiento naranja no le ayudó para tentar los corazones de los panistas.
En suma, los expolíticos y políticos acudieron a la Sala de Cabildos, algunos en calidad de activistas y otros sí claramente para posicionar a su partido. La duda es dónde estaban cuando comenzó a gestarse el aumento, dónde han estado con otras exigencias de relevancia para la sociedad, pero más allá de todo esto la verdadera duda es ¿dónde están los ciudadanos leoneses? ¿Los usuarios del transporte público?
Agripino y su contrataque en el Congreso del Estado
Finalmente se dio la mesa de trabajo entre las integrantes de la Comisión para la Igualdad de Género y el rector general de la Universidad de Guanajuato, Luis Felipe Guerrero Agripino sobre el tema de los acosos sexuales a alumnas de la institución.
Esta reunión, que por cierto sí fue pública, estuvo marcada por dos momentos: primero los cuestionamientos de las legisladoras hacia Guerrero Apripino y el contrataque de este último para criticar el Código Penal del Estado.
Bueno, antes de continuar hay que señalar que la Comisión antes mencionada está integrada únicamente por mujeres, pero ningún diputado asistió lo que demuestra su nulo interés en este tema.
Resulta que fueron varias preguntas incómodas para el rector general sobre la atención que se les da a las víctimas de acoso y hostigamiento sexual; un ejemplo aquella denuncia publica el año pasado por 17 alumnas en el Campus León cuyos profesores salieron librados con una sanción de ocho días de suspensión.
Agripino las respondió de manera general.
Total, que terminó la primera ronda de la mesa de trabajo y Agripino dijo: ahí les va la mía y comenzó a reprochar algunas incongruencias en el Código Penal cuyas penas no son proporcionales al delito.
Puso por ejemplo el abuso sexual donde la sanción es menor a la del hostigamiento y de plano regañó a las legisladoras por esta situación y les hizo el señalamiento de que son quienes deben armonizar la ley que está por cumplir 18 años de su entrada en vigor.
Al final no solo el rector de la máxima casa de estudios del estado se llevó tarea para tratar de erradicar estos casos de acoso si no también las diputadas que tendrán que trabajar en reformas al Código Penal.
