Ernesto Prieto Ortega ha sido uno de los principales críticos de Carlos Zamarripa Aguirre. Desde que el ahora coordinador del Grupo Parlamentario de Morena era dirigente estatal del partido y el fiscal ostentaba el cargo de procurador general de Justicia del Estado.
El legislador de Morena esta vez aprovechó un artículo publicado por El Heraldo de México, donde se asegura que Zamarripa Aguirre tiene nexos con el líder de una organización criminal que opera en Guanajuato, para exigir que la Fiscalía General de la República lo investigue y confirme la veracidad de esta versión.
Prieto Ortega aprovecha estas ocasiones para sacar el cobre como oposición. Criticar, cuestionar y señalar son sólo parte de la labor que hace el legislador para hacer quedar mal a Carlos Zamarripa y exhibir que durante los ya 9 años en el poder (primero en la PGJE y ahora en la FGE) la inseguridad en Guanajuato se ha disparado y no hay una adecuada procuración de justicia.
Ciertamente, ese es el papel de oposición y es importante porque juega un contrapeso que idealmente sería sano en la democracia; pero la verdad es que a Prieto Ortega le hace falta firmeza para enfrentar al fiscal general.
Tan así que cuando puede cuestionarlo directamente prefiere no hacerlo, tal y como ocurrió en la pasada mesa de trabajo en la que Carlos Zamarripa se apareció junto con el titular de la secretaría de Seguridad Pública, Alvar Cabeza de Vaca para ‘charlar’ y responder los cuestionamientos de los legisladores.
Era la oportunidad ideal para criticarlo, cuestionarlo y señalarlo, pero Morena la dejó pasar. Y ni qué decir de la pasada comparecencia durante la glosa, pues aunque ahí sí estuvo presente Prieto Ortega, se vio rebasado por la pericia que tiene Carlos Zamarripa al evadir los más duros cuestionamientos… tantos años de experiencia ya lo avalan.
