Enfrentamientos, balas directas a ministeriales y elementos de las policías municipales en todo el estado en un fin de semana y apenas inicio de otro. Elementos cuidando a los ciudadanos, que en los mismos sucesos perdieron a sus hijas.
Esa es la clara radiografía del estado ante la inseguridad que se vive, aquellos que su vocación los llevó a una corporación, se enfrentan a una de las crisis en donde peligran.
No se puede asignar un elemento de policía a cada ciudadano, lo escuchamos en alguna comisión de Seguridad en el Ayuntamiento de León y tienen toda la razón, pero entonces de qué forma pueden realizar su trabajo y no ser las víctimas.
¿Qué protocolo no se está siguiendo o la formación que están teniendo en las academias de Seguridad que ya no es suficiente?
Los modelos de seguridad han caído en ser una copia, de la copia, o bien replicar estrategias que han funcionando en otros estados pero que aquí se quedan cortas.
Las autoridades municipales y estatales hablan de una constante capacitación, de que los elementos nunca abandonen la “escuela” para que siempre estén preparados. Pero, cómo hacerlo si las corporaciones no están completas y siempre están 50 y 50: en calle y descansando.
La tarea ya no es solo crecer, reclutar, y sacar policías, ahora viene otra: mantenerlos con vida.
¿Ahora los municipios son los culpables?
Por todos es bien sabida la crisis de inseguridad por la que atraviesa el estado sobre todo en el número de homicidios que se registran en los diferentes municipios que colocan siempre a la entidad en los primeros lugares en ese ámbito.
Ahora bien, las autoridades de los niveles de gobierno sobre todo la federal y la estatal se han cansado de señalarse como las culpables de la situación de inseguridad, pero ahora les tocó el turno a los municipios.
La comisionada y vocera en materia de seguridad el gobierno del estado, Sophia Huett López expuso que varios municipios han incumplido en sus avances de seguridad pese a que el gobierno estatal destinó 200 millones de pesos para todos.
Incluso les dejó el recado de que algunos van a recibir menos presupuesto en la siguiente entrega que será de 400 millones de pesos como castigo por incumplidos.
Eso sí, Huett lanzó la piedra pero escondió la mano porque no quiso decir el nombre de los municipios que van retrasados en materia de seguridad y prefirió que sean los medios de comunicación quienes los destapemos.
Aquí el detalle es que más allá de quién incumpla o quien no haga su trabajo en seguridad, al final la verdaderamente afectada es la ciudadanía que pide resultados, pero éstos de plano no llegan al estado.
