Luis Alberto Villarreal va no solo por la reelección como alcalde de San Miguel de Allende, sino por lo que sería un nuevo periodo, tras gobernador de 2015 a 2018 el municipio, para luego cedérselo a su hermano Ricardo y retomarlo en la elección pasada.
Todo indica que nadie en el PAN se interpondrá en la candidatura de Luis Alberto, quien además aparece como favorito en las encuestas para ganar nuevamente.
Así, de ganar, será el tercer trienio consecutivo de los hermanos Villarreal, quienes consolidan una suerte de cacicazgo en San Miguel.
No deja de llamar la atención que el PAN carezca de otras opciones que ofrecer a los sanmiguelenses; como también que la oposición no sea capaz de brindar una alternativa diferente a los electores, a pesar de tantos años.
Ante la escasa imaginación de los partidos políticos, la última palabra la tendrán los ciudadanos de ese municipio, pero mientras San Miguel sigue siendo un coto de los Villarreal.
Esqueda, el procurador
Ayer, el Congreso del Estado designó a Vicente Esqueda como el nuevo procurador de los derechos humanos en el estado.
En medio de posicionamientos en contra de dicho nombramiento, incluso de invitaciones a ampararse en contra del mismo, Esqueda tomó protesta.
La tarea que tiene encima no es nada fácil. Sin tener derecho a tener una curva de aprendizaje, a contrarreloj, le tocará convencer a las organizaciones civiles y a la sociedad en general de un trabajo proactivo y en favor de los derechos humanos, más allá de su militancia panista.
Eso implicará posicionarse sobre temas que el anterior ombusperson fue omiso, como los matrimonios entre parejas del mismo sexo, el derecho al aborto y muchos más.
Superar a Raúl Montero, no será difícil. El verdadero reto de Esqueda es hacer que la PDHEG funcione y sea lo que en todos sus años de vigencia, no ha logrado ser.
Desde hoy, la pelota está en la cancha de Esqueda.
