Recientemente terminamos la maestría en Psicoprofilaxis Perinatal con duración de 2 años, en la cual aprendimos y reforzamos conocimientos que nos permiten seguir acompañando parejas en los cursos de psicoprofilaxis y en el nacimiento de sus bebés.
En esta maestría conocimos personas muy valiosas, quiero platicarles el caso de Emiret Carrillo Gallegos (Emy) quien es licenciada en salud pública y que fue un ángel para nosotras en las clases, tanto por sus comentarios certeros como por tener siempre una actitud positiva que nos contagiaba y nos llenaba de energía. En este mes de septiembre la invitamos a que nos apoyara en el maratón de partos que sabíamos que teníamos. Para ella significaba aplicar lo aprendido en teoría y corroborar en la vida real la magia del acompañar a las parejas en el proceso de parir y nacer, pues la vivencia es la base de la construcción de la experiencia y para nosotras sería un apoyo por si se nos juntaba algún parto. Así que con el debido permiso de las parejas fue incluida en los acompañamientos.
Iniciamos con la pareja que pensamos seria la última por su fecha probable de parto. Pero como en los partos no hay nada escrito, recibimos la llamada justo a tiempo de que Emy llegara a León. Fue un nacimiento mágico y maravilloso, la mujer siempre super conectada con su bebé y con un control increíble de las contracciones. Fue un trabajo de parto super bonito que incluyó caminata, masaje, regadera, visualización, posturas y movimientos muy variados, bromas y como toque especial, la tía del bebé llevó un “tambor” para tocarle mientras estaban en trabajo de parto. Todo esto contribuyó a que el nacimiento de este bebé estuviera lleno de una conexión armoniosa entre la familia, las doulas y las parteras. Parto en casa, parto en agua; Emy siempre conectada y respetuosa logró aplicar todos sus conocimientos y parecía que hubiera acompañado mil partos antes. Nadie pensaría que era su primer acompañamiento. El bebé llegó a las 00:09 del día 14 con paz y armonía en un nacimiento mágico y maravilloso.
Después de esta experiencia fuimos a casa a dormir un rato, sin embargo seguiríamos a la expectativa de otro parto, pues la noche anterior (alrededor de las 8) nos escribió otra mamá para informar que ya tenía contracciones súper leves, y que ella avisaría en cuanto se regularizaran. Como a las 6 am nos escribió que ya estaban un poco más intensas, así que fuimos de prisa a la casa donde fue el parto la madrugada anterior pues habíamos dejado ahí la tina y otros materiales. Salimos como el bólido hacia el municipio de Encarnación de Días (“La Chona”) ya que allá nos esperaba la otra mami. El camino se nos hizo eterno porque ella ya tenía contracciones más intensas. Sin embargo logramos llegar a tiempo para el nacimiento. A nuestra llegada, la mujer ya estaba con 10 cm de dilatación y empezamos todas (parteras, doulas y familia) a colaborar para dar apoyo. Fue un parto en casa, vertical e intenso. Las emociones a flor de piel porque la mami tenia en su memoria muscular la mala experiencia de su parto anterior, no obstante ella se mostró súper poderosa, con una fuerza física y fortaleza interior que es admirable… Parió a un bebé mágico. Son pocos los bebés que nacen enmantillados como fue el caso. Emy a la altura de todo el equipo presenció esta maravilla y seguro no fue por casualidad. Este bebé llego a las 11:24 am del 14 de septiembre, y después de revisar que todo estuviera bien con la mamá y con el bebé, regresamos a León.
Las parteras se fueron a San Miguel. El día 15 recibimos la llamada de otra mamá que estaba en trabajo de parto, acudimos al llamado todo el equipo (doulas y parteras) pero fue falsa alarma pues aún no estaba en trabajo de parto, solo fueron avisos llamados pródromos. Así que los dejamos para que se quedaran tranquilos y con la certeza de que regresaríamos en cuanto ellos lo necesitaran. Regresamos con ellos el jueves ya con trabajo de parto aunque las contracciones seguían espaciadas. Este acompañamiento fue largo, porque los papás aún no soltaban el miedo de su experiencia anterior que fue una cesárea no necesaria. A esto se agregaban otras situaciones que no ayudaban a la situación: por un lado el bienestar de su nena de 2.6 años, quien estaba siendo cuidada por los abuelos y por el otro, las dudas que les surgían sobre la decisión de parir en casa, pues varias personas opinaban “el parto en caso es un riesgo”. Sin embargo ambos papás finalmente fluyeron y se dejaron guiar. Para las 3 am del día 17 recibimos el mensaje de otra mami que había roto fuente pero aún no había contracciones. A las 5 am el ginecólogo indicó que ya había que acudir con la pareja. Ante esta situación, Emy se quedó con las parteras Maricruz Juárez y Bibi Juárez lo que le permitió presenciar el intenso parto de una mujer soltando y fluyendo con su instinto mamífero, sosteniendo y apoyando como parte del equipo. Una de las cosas más gratas de este nacimiento es el agradecimiento que la mamá le hizo particularmente a la partera Maricruz Juárez por su profesionalismo y paciencia, sus palabras literales fueron: “aun cuando hubiera pagado el servicio hospitalario más caro del mundo, ningún obstetra me hubiera tratado con la paciencia y respeto que tú lo hiciste, y no me hubieran dado el tiempo para parir a mi bebé”.
Por mi parte acompañé mientras tanto un parto hospitalario maravilloso, donde una vez más presencié el poder de parir. Un parto muy divertido, pues el bebé decidió nacer justo el día del cumpleaños de su mamá. A pesar del cansancio y del agotamiento ella se conectó, se concentró, fluyó meditando, bailando y respirando; a pesar de pedir la analgesia no la usó y logró un parto mágico y poderoso un bebé fuerte que llego eligiendo muy atinadamente a sus padres.
Justo cuando había nacido el bebé donde Emy se quedo con las parteras, recibieron el llamado de otro bebecito que llegó el mismo día 15 pero como a las 5 pm. Emy junto con las parteras atendieron el llamado y cuidaron a la mamá, bebé y familia. Por lo que cuentan también fue un parto maravilloso donde el poder de la mujer surgió y tuvo a toda su familia orando por el bienestar de los 3 a pesar de no estar de acuerdo con el parto en casa, pues en su opinión “el riesgo es mucho”. Al igual que los partos anteriores el nacimiento se dio en condiciones seguras y armoniosas sin los riesgos tan temidos por la familia.
Emy esperó el llamado de la última mamá que sería un parto hospitalario. También fue un poco largo ya que llegamos con ellos martes 22 al medio día, y nació hasta el siguiente día alrededor de las 19:02 pm. Este nacimiento para mi es muy significativo ya que la experiencia anterior de la mami no fue como ella lo planeó, entonces mis expectativas de apoyo eran muy altas ya que yo quería que ella tuviera su parto ideal. Emy estuvo presente apoyando, fue la encargada de meter el banco de partos a la sala de expulsivo del hospital sostuvo a la mamá con el rebozo, y su colaboración fue muy valiosa en este nacimiento. Myrna y yo siempre decimos que los bebés cuidan a su mamá y a ellos mismos y en este parto lo confirmamos, agradezco la paciencia del Dr. Paul García Guerra ya que otro obstetra le hubiera hecho una cesárea y no le hubiera dado el tiempo necesario para que bebé se fuera acomodando a su tiempo, a su ritmo para poder nacer. El bebé llegó con una circular de cordón apretada en el cuello y en el tórax (de bandera), por eso el expulsivo se alargó. El bebé necesitaba tiempo para poder acomodarse y nacer. Mis respetos para esta mamá tan fuerte y poderosa, que a pesar del cansancio sacó fuerza para poder parir a su bebé que es un guerrero increíble y todo el tiempo nos estuvo hablando con su corazón latiendo perfectamente.
En resumen, Emy tuvo la fortuna de acompañar 5 nacimientos, 4 de ellos en casa u uno más en hospital. Confirmó el poder de la mujer para parir, confirmó que una mujer en parto es sabia, poderosa, fuerte y armoniza con su cuerpo, confirmó que en el momento que ella se da permiso de ser mamífera fluye y los bebés llegan también con esa magia increíble a una vida extrauterina respetada, amada y esperada.
Trabajó en armonía haciendo equipo con las parteras, reafirmando que los nacimientos en casa son seguros y que la partera profesional cuida y acompaña a la mujer y su familia en el nacimiento, que en ningún momento se pone a nadie en riesgo y se respeta la decisión de la mujer desde las posturas para controlar las contracciones como la posición para el nacimiento de su bebé.
El parto hospitalario que le tocó vivir estuvo fuera de lo convencional ya que el Dr. Con el que hacemos equipo es muy respetuoso de lo que la mujer quiere para el nacimiento de su bebé y realiza mínimas intervenciones. Emy expresó que este médico: “es un partero que se convierte en médico cuando se pone la bata”. Su definición del Dr. me encanto pues coincido con ella.
De este modo tan especial, con este privilegio no planeado de acompañar tantos partos en tan pocos días, le damos la más cordial bienvenida al mundo de las Doulas a Emiret Carrillo (Emy) con la certeza de que el acompañar a las mujeres y sus familias en todo el periodo perinatal es su vocación. En esta semana ella nació como doula. Nos dejó ver su sensibilidad, su conocimiento y su habilidad. Seguro aprendió muchas cosas del equipo, pero nosotras también aprendimos de ella. Aprovecho para agradecer también el amor y respeto de Maricruz Juárez, Bibi Juárez, Myrna Torres, Paul García y Jairo Barajas. Gracias porque hemos conformado un gran, gran equipo que estamos en la sintonía de una de nuestras frases favoritas del Dr. Michel Odent: “para cambiar al mundo, es preciso cambiar la forma de nacer”.
Cuéntanos tu experiencia de nacimiento, ¿tuviste una Doula que te acompañara?, ¿qué te significo?
Infórmate, y consigue el nacimiento que quieres.
Irekani Psicoprofilaxis.León
Irekani Birth Coaching.León
JUDITH PELCASTRE GUERRERO
EDUCADORA PERNIATAL, DOULA, ASESORA DE LACTANCIA.
Cel. 477 246 7356
Correo: partosuaveleon@hotmail.com
@IrekaniPsicoprofilaxis
