Para la campaña presidencial que vivimos en nuestro país el presidente conduce la tercera agenda, la que sirve para sostener a la de la candidata de morena y en la práctica la que le dicta lo que deben hacer.
A todos los que ven en la propuesta del presidente López la posibilidad de conservar el poder derivado de los procesos electorales, aunque se estén haciendo todos los esfuerzos para que coincidan en el tiempo las maniobras del presidente y las propuestas de campaña del oficialismo: Todo el dinero del estado, todos los recursos derivados de la corrupción, como dice Sanjuana, hasta las liquidaciones de la agencia de noticias deben pagar, por lo menos, el 20%, toda la estructura de los siervos de la nación trabajando a sueldo y en forma territorial para asegurarse de que los mexicanos que reciben recursos a través de los programas sociales acudan a votar por la propuesta del presidente López, todas las granjas de votos al servicio de los temas de la propuesta de morena, todos los distractores generados desde el poder ejecutivo para que los opositores se ocupen de ellos mientras el oficialismo hace la campaña de tierra.. y las encuestas muestran que la candidata del oficialismo no logra cambiar un punto porcentual.
El presidente está apostando por veinte propuestas de reformas constitucionales sabiendo que no tiene los activos suficientes en el poder legislativo para una propuesta viable, pero le ayuda a fortalecer el encono contra los miembros del poder judicial y al mismo tiempo da a conocer “GRACIAS” el libro en el que dice que se va a retirar de la política… ciertamente parece uno más de esos extraños casos de políticos que han escrito más libros de los que han leído.
Pero el tema es la DEMOCRACIA, así nada más, sin adjetivos, es decir, respetar la voluntad de los ciudadanos y punto.
Pero parece que estamos planteando un imposible; los partidos políticos, decidieron acabar con sus democracias internas, eliminaron todo proceso que implique vencer o ser vencido en una asamblea, en una convención, ante urnas.
Así es que la realidad venció a la democracia interna de los partidos y TODOS eliminaron los procedimientos democráticos, por lo tanto, ahora, todo se resuelve por la pandilla que domina las posiciones de control en los partidos, por el grupo que controla el resto de lo que indican sus estatutos y reglamentos… y desde luego que existe pesimismo hacia la agenda política de las dirigencias de los partidos.
Los del frente opositor no se han enfocado a los votantes de la tercera edad y que reciben dinero del gobierno federal con el manejo en la narrativa, como se podría esperar… “es de parte del gobierno…” “te lo manda el presidente… te lo manda la candidata…
No obstante el mayor número de votantes que puede cambiar el sentido de la elección y que apenas empieza a despertar a los procesos electorales no ha pasado de 35 años, los técnicos de estadística aplicada les llaman switchers y así como en las tecnologías de información son dispositivos de interconexión que permiten estar conectado con otros equipos… análogamente en el caso de los procesos electorales serían grupos de personas que cambiarían el sentido de su votación al razonar que pueden ser el factor de cambio en el proceso electoral.
De acuerdo a estudios de comportamiento electoral podrían cambiar el sentido de su votación hasta un 23% de los potenciales votantes en el próximo proceso electoral mexicano.
La convocatoria del día 18 no es de los partidos… pero si es claramente para que los militantes de los mismos asuman primero su papel de ciudadano y después el de militante de algún partido.
Es de los ciudadanos, de los mexicanos que seguimos pensando que la democracia es la condición que mejor le funciona al estado mexicano y que no dejamos de ver en peligro ante la embestida del oficialismo que con el argumento propagandístico de morena encubre la estrategia de caminar por vías de elección hacia una dictadura populista.
La iniciativa de hacer el segundo piso de la transformación es solo el nombre propagandístico del proyecto de un autócrata que ve con desesperación que se le terminó el tiempo y solo le queda la alternativa de adiestrar a un equipo que se cohesiona desde una ideología, pero se integra en torno a la corrupción y la ambición del poder político.
La marcha del próximo día 18 de febrero es un recordatorio al trabajo por la democracia de nuestro país, desde luego que requiere estar presente, convivir con los millones de mexicanos que estaremos manifestando nuestra voluntad de trabajar por un México democrático donde sea posible recuperar las estructuras de la nación mexicana después de un sexenio , casi por terminar, que estará marcado por el desastre en los indicadores de pobreza, en el desmantelamiento del sistema de salud, en la peor crisis del sistema educativo en todos los niveles, en la acumulación de una deuda generada como consecuencia de un gobierno indolente e incompetente.
La marcha del día 18 de febrero será el punto de partida para recuperar los espacios de democracia que el gobierno actual ha despreciado y a cambio de ello sigue con la estrategia de polarización entre los mexicanos.
Con democracia más unidos que nunca.
Hasta la próxima en PROSPECTIVA.
