Cuando esté leyendo esta columna ya habrá pasado la presentación del segundo informe de gobierno presidencial, ya no hay protocolos, en realidad no importa si se tiene que informar, si es una obligación del poder ejecutivo presentar ante los legisladores la información del estado que guarda la administración pública federal, si existe alguna expectativa por conocer en qué se ha gastado el dinero de los mexicanos, si ha tenido alguna prioridad, alguna estrategia que marque esas prioridades… en fin, algo que de señales de que la nación mexicana le importa en algo al presidente López.
Por el momento los anuncios de televisión y en las redes sociales solo comunican el interés del presidente por mantener los distractores políticos que le representan, a su vez, mantener algunos indicadores de aceptación en las encuestas de perfiles electorales. Así es, al presidente le importa mucho no ponerse en riesgo de perder las elecciones intermedias que por los ajustes de los calendarios electorales, serán las que tengan para votar al mayor número de cargos de elección popular en la historia del país.
Sin importar si es legal y económicamente viable, el presidente López insiste en que la corte vea “con buenos ojos” que se haga una consulta popular para preguntarle a los mexicanos si están de acuerdo en llevar a juicio político a todos los ex-presidentes que están vivos, menos a Luis Echeverría.. Todos por corrupción, sin querellas, sin denuncias, sin debido proceso… así nada más porque al presidente se le ocurrió en alguna mañanera, si la materia es corrupción tendría que incluir a todos y también agregarse en la lista el propio presidente López, que también es parte de los políticos que contribuyen a los desfalcos de erario.
En realidad es el tema del presidente: cómo mantener ocupados a los mexicanos en la morbosidad política.
Eso de gobernar y ver por el bien de los ciudadanos no cabe en la corta visión del grupo en el poder.
Así que si usted quiere estar bien informado no busque los documentos del informe, no hace falta, estamos viviendo en el segundo año de gobierno con los indicadores más lamentables, el mayor número de crímenes dolosos en un siglo, el mayor número de muertos en la pandemia y siguen sin tener una estrategia que permita ver el fin de este problema que daña la vida de todos los mexicanos, la educación pública está desestructurada, en el peor rezago de toda la historia de la educación pública del país, con pronóstico de crecimiento negativo hasta por -18% del PIB y un grupo en el poder que sigue saqueando al país, mintiendo y polarizando a la sociedad.
La ambición de poder está afectando a los propios urgidos de poder y los está enfrentando entre ellos, si entienden cuál es su responsabilidad ante los ciudadanos no es tan importante. Todos se sienten con los méritos suficientes para ser relevo en el poder en turno. Eso de “gobernar sirviendo” es una más de las frases que hay que usar para que la gente crea que se preocupan por los ciudadanos…
Mientras tanto los partidos de oposición siguen en cuarentena, no salen ante los medios, no convocan a nada, no plantean mecanismos de equilibrios en los escenarios políticos, en el mejor de los casos, están callados.
Da la apariencia que a los dirigentes de los partidos de la oposición ese es un tema que puede esperar algunos meses más, por lo pronto, esperar a que se termine la confrontación que les provoca a los dirigentes de morena, la amenaza del coordinador de los diputados del partido del trabajo, quienes a base de negociaciones y manipulación hacen lo que sea por conseguir tener los diputados que les falta; para conseguir desplazar al PRI de la tercera posición y por tanto el derecho a presidir la cámara de diputados en el tercer periodo.. En MORENA no están dispuestos a tener al diputado Fernández como presidente de la cámara, no está en sus planes aguantar las insolencias del diputado.
Es bueno saber qué hay ciudadanos que buscan sus propios mecanismos de coordinación y de participación política, que ofrecen las posibilidades de liderazgos innovadores, conocedores de la realidad del país e interesados en participar, lo lamentable será que los partidos de oposición pierdan la posibilidad de renovar sus cuadros desacreditados, limitados y demasiado vistos como para que los ciudadanos se desanimen y terminen creyendo que no hay alternativas, ni viabilidad para el país.
El tiempo de ciudadanizar la política es ahora, si los partidos de oposición siguen presentando los mismos frentes y hacen política con los mismos procedimientos; lo único probable será que obtengan los mismos resultados. Que lamentable será que el grupo en el poder siga destruyendo al país y los partidos opositores dejen el espacio libre porque no entendieron los procesos para reestructurarse ahora.
Es el tiempo de generaciones nuevas en la política nacional, los que hoy tienen la posibilidad de servir al país han demostrado que no tienen el talento, la ética ni la intención de servir a los mexicanos… su mejor aportación es hacerse a un lado y dejar que surjan nuevos valores en la política mexicana, especialmente por lo mucho que hay que reestructurar y el poco tiempo con el que se cuenta…
Hasta la próxima PROSPECTIVA.
