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jueves, marzo 28, 2024

Tiempo de renovarse…

Grupos de empresarios han pasado a juntas dentro del Museo-Palacio Nacional, convocados por los equipos del presidente López, acuden con alguna expectativa, por ejemplo, que no se acuerden de reclamarles los depósitos para pagar los boletos de la rifa del avión, que no los junten con Ricardo Salinas o alguien más del grupo del consejo mexicano de negocios, tampoco quieren coincidir con Slim o los que están en los temas de las obras-capricho del presidente. Pero, es que cuando los llaman, solo una causa de fuerza mayor, comprobable, puede hacer que no acudan a la casa-Palacio del presidente.

El tema no tendría importancia si no fuera por el significado que tiene para los interesados en las noticias diarias de lo que sucede en nuestro país.

La profunda crisis económica que vivimos, la más grave desde la revolución, está afectando a todos, sin embargo hay segmentos de la población que están viendo cómo se contraen sus márgenes de maniobra y se reducen también sus posibilidades de mercado mientras que el inquilino del Palacio sigue haciendo análisis económicos (y actúa como si supiera…) y pronostica que la recuperación vendrá a partir del mes de octubre. Hasta piensa que el país ya tocó fondo porque ya nada más se dio de baja “poquitos” en las listas del seguro social.

Los empresarios acudieron al Museo-Palacio para comentarle al presidente acerca de la reestructura que quieren hacer del sistema de pensiones para los trabajadores del país con cargo a la economía de las empresas. Es un asunto por demás importante, en beneficio de los trabajadores mexicanos que por lo pronto aleja la tentación del presidente de manipular los fondos de pensiones de los trabajadores y también aleja la tentación de los diputados de legislar para que el ejecutivo tome recursos de los instrumentos de ahorro y pensiones de los mexicanos.

De estas reuniones salieron los empresarios con la convicción de que el presidente no les entendió… tampoco le importó. No tiene ganas de escuchar de temas que impliquen un esfuerzo por rescatar al país de la crisis en la que nos encontramos.

Adicional a estos hechos prevalece la actitud de no reconocer estructuras y dejar correr la comunicación con los empresarios sin importarle si representan algún gremio en particular, si tiene algún significado que estén agrupados o si los sectores están más enterados por la naturaleza de los mercados que deben cuidar y entrar eventualmente en procesos de recuperación.

 

No tengo duda que las organizaciones empresariales tienen poco tiempo para redefinirse y encontrar mejores canales de comunicación global para buscar mejores opciones de mercado y mejores canales de comunicación política… si es que les parece importante encontrarse con alternativas de permanencia en la economía, maltrecha y en crisis pero antes de que no quede nada para sus sectores.

Desde luego que entre las alternativas más eficaces está la capacidad de abrir espacios de coordinación con los institutos de investigación, con los talentos creativos, con los conocedores de las redes sociales, hoy las empresas requieren una gran fuerza en su capacidad de comunicar, no solo acerca de sus productos y servicios, no solamente sobre las operaciones financieras que necesitan, se requiere comunicación para tener información confiable del entorno económico y político que vivimos todos los mexicanos.

Es tiempo de reconfigurase en los gremios empresariales y ampliar las miras para cuidar sus empresas, la planta productiva y la capacidad de mantener sus mercados; interesarse por la evolución política del país y actuar coordinadamente.

La pandemia ha afectado a todos, en todos los sentidos; pero no hay expectativa de solución a la crisis sanitaria. No tienen idea de qué hacer y solo atinan a ver factores políticos electorales que no pongan en riesgo su permanencia en el poder. Para las elecciones intermedias falta un poco menos de un año.

Hacen falta nuevos mecanismos de diálogo entre los sectores productivos del país, hace falta rehacer la agenda para la productividad nacional y desde luego hace falta un nuevo código de diálogo con las autoridades, al gobierno mexicano no le importa si los mexicanos des configuran los sistemas educativos o los sistemas productivos, el gobierno está más dispuesto a administrar la crisis que a resolverla y proponer espacios de prosperidad y bienestar para los mexicanos. Hace falta contrarrestar el discurso de odio a la sociedad del presidente desde el diálogo de reconstrucción de la sociedad.

 

Hasta la próxima PROSPECTIVA.

Gerardo Mosqueda
Gerardo Mosqueda
Presidente del Instituto de Administración Pública de Guanajuato. Correo electrónico: gmg@gerardomosqueda.com.mx Twitter: @MosquedaGerardo Facebook: gerardomosqueda

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