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viernes, marzo 29, 2024

El tipo de cambio y los pobres

Es bien sabido que las remesas representan para los hogares mexicanos una muy importante fuente de ingresos. En este sentido el Banco Mundial acaba de informar que estima que nuestro país recibirá este año unos 24 mil millones de dólares por concepto de remesas, cifra que si bien es elevada, está por debajo de los 26,100 millones de dólares que se recibieron en 2007.
No necesito señalar que las remesas representan para los hogares mexicanos, sobre todo para los más pobres, una importantísima fuente de ingresos. En algunos casos las remesas vienen a complementar los ingresos generados por el hogar nacional, pero en otras ocasiones las remesas se constituyen como la única fuente de ingresos de algunos hogares.
Ante lo anteriormente expuesto resulta evidente que el nivel del tipo de cambio es fundamental para los ingresos de los hogares mexicanos que dependen de las remesas para subsistir. Y es que no es lo mismo para estos hogares que les envíen $100 dólares y que en México les den $14 pesos por cada dólar a que les den sólo $12.50 pesos por dólar.
De acuerdo a estimaciones elaboradas por GAEAP, el tipo de cambio de equilibrio en base a diferenciales acumulados de inflación entre Estados Unidos y México de 1997 a la fecha, es de $13.80 pesos por dólar, por lo que el nivel actual de tipo de cambio en torno a los $12.75 pesos por dólar implica que los hogares mexicanos dejan de recibir un peso por cada dólar que les es enviado. Esto significa que actualmente derivado de la sobrevaluación del peso, los hogares mexicanos reciben aproximadamente 7.2% menos ingresos en moneda local con respecto a los que deberían recibir si el dólar estuviera en su nivel de equilibrio.
Todo esto implica que los hogares mexicanos dejaron de recibir en el año 2012 unos 14,000 millones de pesos derivado del grado de sobrevaluación de nuestra moneda registrado cada mes y el monto de remesas recibido en cada periodo.
Estos 14,000 millones de pesos que dejaron de recibir los hogares mexicanos son muy importantes, ya que el grueso de las familias que reciben remesas son de bajos recursos, y por lo general estos recursos se destinan para comprar comida, ropa y para el transporte, componentes del Índice Nacional de Precios al Consumidor que tuvieron incrementos importantes en 2012.
Así pues, con la sobrevaluación del peso los hogares pobres en México están en el peor de los mundos porque les pagan menos pesos por sus dólares recibidos y porque los bienes que más consumen son los que más están aumentando de precio (alimentos principamente).
De esta forma vemos que la actual política monetaria restrictiva llevada a cabo por parte del Banco de México, la cual ocasiona elevadas tasas de interés y entrada masiva capitales a nuestro país, actúa en perjuicio de los ingresos de los que menos tienen, y de esta forma inclusive la brecha entre ricos y pobres se amplía.
Pero eso si, la política monetaria que perjudica tanto a los pobres ayuda a los ricos a comprar dólares baratos. No se trata de ser populista, pero la mujer jefa de familia que recibe sus $200 dólares  al mes y ve que se los pagan a unos $12.30 pesos por dólar padece el tipo de cambio; mientras que la mujer que está ansiosa por irse de compras a Houston esta temporada decembrina está feliz porque compra los dólares para el “shopping” en $12.75 pesos.
Hemos dicho en infinidad de ocasiones que el Banco de México debe ajustar su política monetaria de manera que disminuya sus tasas de interés, ya que con esta medida habrá menor entrada de dólares al país y por lo tanto tendríamos un tipo de cambio más cercano a su valor real: $13.80 pesos por dólar.  Es decir, si entran menos dólares a México el dólar se encarece respecto al peso y el tipo de cambio de mercado se acercará al teórico de equilibrio ($13.80 pesos por dólar)
Hemos criticado que el Banco de México utilice al tipo de cambio como elemento para “anclar” la inflación, ya que esto se da a costa de la planta productiva nacional, ya que se ocasiona un mayor nivel de importaciones y se encarecen nuestras exportaciones, lo que eventualmente daña al empleo y la producción.
Ante todo lo anteriormente expuesto esperemos que el Banco de México sea sensible y se dé cuenta de que no será de mucha ayuda para el desarrollo nacional el que tengamos bienes del exterior baratos si esto ocurre a costa de que las familias tengan menos ingresos en pesos y pagando con un mayor desempleo. Ya lo dice el dicho que el bien más caro es aquel que no se puede comprar.
Así pues, esperamos que sea escuchada la voz del pueblo que ha sido afectada negativamente con esta política monetaria astringente que ya ha durado muchos años, que si bien nos ha dado estabilidad macroeconómica, también es cierto que ha convertido a México en una fábrica de desempleados y subempleados.

Director General GAEAP
alejandro@gaeap.com
Twitter: @alejandrogomezt

Alejandro Gómez Tamez
Alejandro Gómez Tamez
Director General del Grupo Asesores en Economía y Administración Pública. Tel (477) 326-3633 http://alejandrogomeztamez.com/ En Twitter: @alejandrogomezt Visita nuestra página de internet: http://www.gaeap.com/

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