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jueves, marzo 28, 2024

La nueva oportunidad para México

El pasado domingo 2 de diciembre, en el Castillo Chapultepec, el presidente Enrique Peña Nieto anunció el Pacto por México, el cual es un acuerdo que fue firmado por las principales fuerzas políticas del país y el propio presidente. Con este documento se plasma la voluntad de aprobar las reformas legales que el país requiere y que hasta ahora no han caminado por la falta de acuerdos.

En principio se supone que las tres primeras reformas que impulsarán los actores políticos son: la educativa, la de telecomunicaciones y la ley nacional de responsabilidad hacendaria y deuda pública. Sin embargo, el documento firmado menciona toda una gama importante de cambios que el país necesita, a tal grado que me atrevo a señalar que si en el sexenio que comienza se lograrán la mitad de las propuestas entonces viviríamos una verdadera transformación de México.

¿Cuáles son los puntos más destacados en materia económica que contiene el Pacto por México? El capítulo económico tiene once líneas estratégicas, las cuales se enumeran a continuación:

1. Extender los beneficios de una economía formada por mercados competidos.
2. Garantizar acceso equitativo a telecomunicaciones de clase mundial.
3. Promover el desarrollo a través de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación.
4. Desarrollo Sustentable.
5. Realizar una reforma energética que sea motor de inversión y desarrollo.
6. Transformar la minería en una industria eficiente y socialmente responsable.
7. Transformar la banca y el crédito en palanca de desarrollo de hogares y empresas.
8. Transformar el campo en una actividad más productiva.
9. Aplicar una estrategia Nacional para el Desarrollo del Sur – Sureste.
10. Deuda de los Estados.
11. Realizar una reforma hacendaria eficiente y equitativa que sea palanca de desarrollo.

Dentro de estas líneas, vale la pena destacar que se buscará intensificar la competencia económica en todos los sectores de la economía, con especial énfasis en sectores estratégicos como telecomunicaciones, transporte, servicios financieros y energía. Así pues, es altamente positivo que se busca fortalecer la Comisión Federal de Competencia (CFC) a través de dotarle mayores herramientas legales para determinar y sancionar posiciones dominantes de mercado en todos los sectores de la economía, particularmente se le otorgará la facultad para la partición de monopolios, tal como existe en la legislación de los Estados Unidos.

Otro punto destacable que sin duda impulsará el desarrollo de México es que se busca generar mucha mayor competencia en telefonía fija, telefonía celular, servicio de datos y televisión abierta y restringida. Esto es fundamental, ya que esta es una palanca para el desarrollo, y en este sentido México muestra un fuerte retraso respecto a otras naciones miembros de la OCDE.

Un aspecto relevante es que de nueva cuenta se nos promete que la inversión en ciencia y tecnología anual alcanzará el 1% del PIB. Esto es algo que se ha mencionado desde el gobierno del Presidente Vicente Fox y que no se ha alcanzado. Depende de la recaudación fiscal y de los Diputados que asignan el presupuesto el que este punto en concreto se logre por fin.

En materia de desarrollo sustentable es altamente positivo que se diga de manera explícita que hay un compromiso por modificar nuestro estilo de vida ante el cambio climático, el cual indiscutiblemente está padeciendo el mundo. Y para ello se debe aplaudir la intensión de disminuir el uso de combustibles fósiles, replantear el de manejo hídrico del país, y mejorar la gestión de los residuos en todo el país.

El Pacto por México menciona el compromiso de realizar una reforma energética que sea motor de inversión y desarrollo. De esta forma se busca que la reforma energética convierta a ese sector en uno de los más poderosos motores del crecimiento económico a través de la atracción de inversión. Sin embargo, se deja en claro que los hidrocarburos seguirán siendo propiedad de la Nación. Mientras que se abre a la iniciativa privada el negocio menos lucrativo de los procesos de refinación, petroquímica y transporte de hidrocarburos.

Un punto de fundamental importancia resulta ser el compromiso de transformar la banca y el crédito en palanca de desarrollo de hogares y empresas. Desde esta columna aplaudo que se busque cambiar el marco legal para que la banca comercial y las instituciones de crédito presten más y más barato. Esto lo digo porque resulta un insulto a las clases medias de este país que sea la banca mexicana una de las más redituables para los bancos extranjeros (por las tasas de interés que libremente cobran a sus clientes) y que en 2012 hayan alcanzado su máximo nivel de utilidades en la historia, con el beneplácito de las autoridades financieras del país que se han quedado impávidas ante los excesivos cobros que realizan a los usuarios de la banca en México.

En materia de campo, es positivo que se busque transformar éste para que sea una actividad más productiva, y con esto garantizar la seguridad alimentaria como una política de Estado. Con esto se establecerán medidas específicas para contener el precio de los alimentos, erradicar la pobreza extrema y promover a un sector de la economía que actualmente produce por debajo de su potencial.

En materia de deuda de los estados, tema por demás controversial a partir de que estalló el “Moreira Gate”, es positivo para las finanzas locales que se busque expedir una nueva Ley Nacional de Responsabilidad Hacendaria y Deuda Pública para las entidades federativas y municipios, ya que con esto se busca controlar el exceso de endeudamiento de las entidades federativas y los municipios regulando el acceso a la fuente de pago y a las garantías de la Federación para el endeudamiento subnacional.

Finalmente, en el tema de la reforma hacendaria eficiente y equitativa que sea palanca de desarrollo, cabe destacar que se buscará mejorar y simplificar; además de que se incrementará la base de contribuyentes y se combatirá la elusión y la evasión fiscal. Este último punto sin duda debe abarcar la evasión fiscal que se da en las fronteras mexicanas cuando los importadores declaran un valor de la mercancía por debajo de lo que realmente les costó. Y es igualmente positivo que haya la voluntad de lograr una mayor eficiencia y transparencia en el gasto público.

Como decía líneas arriba, todo esto es tan ambicioso que si se lograra tan sólo la mitad de lo que se prometió, México de verdad sería otro.

Ante todo lo anteriormente expuesto cabe señalar de manera enfática que la firma de este Pacto por si sólo no logra nada para nadie, y es por ello que se vuelve indispensable que el Congreso de la Unión, los Secretarios de Estado, el Gobernador del Banco de México y el presidente de la República trabajen con un solo objetivo, y ese es el bienestar de los mexicanos.

No debemos olvidar que también Vicente Fox firmó un acuerdo con las principales fuerzas políticas en el Castillo de Chapultepec. ¿Y que se obtuvo de dicha firma? La respuesta es absolutamente nada. Y es que independientemente de los errores de tacto por parte del presidente Fox, el PRI bloqueó muchas de las iniciativas que ahora propone en el Pacto por México.

Así pues, es nuestro deber como ciudadanos primero enterarnos de qué fue lo que se firmó, y en segundo lugar dar seguimiento y presionar para que lo que se nos prometió se cumpla, ya que México está habido de un modelo de desarrollo económico en el que verdaderamente se creen los empleos que se requieren, aumente la producción, y logremos la prosperidad necesaria para abatir la delincuencia. Es momento de que los políticos sean responsables.

Director General GAEAP*
Alejandro Gómez Tamez
Alejandro Gómez Tamez
Director General del Grupo Asesores en Economía y Administración Pública. Tel (477) 326-3633 http://alejandrogomeztamez.com/ En Twitter: @alejandrogomezt Visita nuestra página de internet: http://www.gaeap.com/

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