Hoy quiero dedicar esta contribución a los Mártires de Tlatelolco (de la época que hayan sido). Lugar mítico y místico en la cosmovisión mesoamericana, así como en el imaginario actual.
Siempre que nos referimos a Tlatelolco, viene a colación el trágico evento de 1968, en el Sigo XX. Pero, existen otros conflictos documentados, que incidieron fuertemente en la historia de México; dos en el Siglo XV y uno en el Siglo XVI.
Tlatelolco se fundó casi al mismo tiempo que Tenochtitlan, en un islote muy cercano a esta última. Se convirtió en ciudad gemela de Tenochtitlan, y las características arquitectónicas y la distribución espacial de sus principales edificios, coinciden con los del área ceremonial de los mexicas. Los fundadores de Mexihco-Tlatelolco y Mexihco-Tenochtitlan, estaban emparentados desde siglos antes, y arriban juntos a la Cuenca de México en la Peregrinación desde Aztlan; ambos grupos provienen del mismo linaje.
Uno de los acuerdos generados entre ambos grupos (después que los mexicas se hacen del poder en 1426 d.C.), era que estarían sujetos a que cada grupo mantendría responsabilidades distintas, pero importantes para el sostenimiento de ambas sociedades.
Las tareas de los tlatelolcas estaban dedicadas al rígido control de las actividades comerciales, en lo que fue el mercado más grande de Mesoamérica, en ese momento. Esto inhibía a este grupo para ejercer cualquier poder político o religioso, tareas que estaban bajo la total responsabilidad de los mexicas.
Estas diferencias son, en parte, lo que deviene en varios conflictos. El primero al que me refiero es en 1431 d.C., estando al mando de Tenochtitlan, Izcoatl (Serpiente de obsidiana), quien estuvo al frente en el lapso de 1427 a 1440 d.C. Se le considera el principal protagonista de la hegemonía mexica, y el primero de ellos ya estando como grupo en el poder. En varios documentos se relata este hecho, pero en todos, el que triunfa es Izcoatl, sometiendo al pueblo tlatelolca, que intentaba seguir sujeto al poder que derrocaron los mexica, para entronizarse.
Hay un evento, el cual no lo cuento como uno de los cuatro que relato, que sucede durante el quinto año de reinado de Moctezuma, pero no es tan trascendental como los otros, aunque debo hacer mención.
El segundo hecho, también relatado en varias crónicas, sucede en 1473 d.C., bajo el mando del más guerrero de los tlatoanis mexicas: Axayacatl (el de la máscara de agua), quien es uno de los que más expande el poderío de la Triple Alianza.
En este caso, la raíz del conflicto es, que los comerciantes tlatelolcas ansiaban el poder político. Algo que no estaba en las reglas iniciales, como ya lo comenté. También, en otros escritos, se documentan posibles conflictos por el control del agua y las tierras. Así que, por lo uno o por lo otro, fueron avasallados y sometidos por los mexicas, y les costó una larga temporada de suspensión de sus actividades, que tuvieron que controlar los mismos mexicas, mientras duró el conflicto.
El tercer suceso trascendental en Tlatelolco es, que se convierte en el último bastión antes de la caída definitiva de ambas ciudades: Tenochtitlán y Tlatelolco el 13 de agosto de 1521 d.C. Defendida por el último Tlatoani mexica, un personaje que tenemos muy presente en la memoria, casi todos los mexicanos: Cuauhtemoc (el águila o sol que desciende), al que torturaron los europeos, más por venganza, que por los “tesoros” que tanto se ha dicho.
Y el cuarto hecho histórico, sucede en el Siglo XX, el 2 de octubre de 1968. Un conflicto que inicia, según las fuentes más doctas, por un problema entre dos instituciones de educación superior, y que escaló de manera vertiginosa hasta convertirse en un movimiento nacional, de características muy particulares, pero muy acorde a los sucesos mundiales.
De los primeros tres sucesos, la bibliografía consultada es bastante, y en caso que la necesite, estimado lector(a), será un placer proporcionársela.
En el caso del cuarto suceso, la bibliografía es muy amplia. En el rubro de novela se han escrito más de sesenta libros, que tienen que ver con ese hecho; además de reportajes, entrevistas, programas, documentales, películas, etc., que no cabrían en este espacio. Le recomiendo, para empezar, las crónicas que realicé para otra sección de este diario, de cinco libros relacionados con el tema. Dejo aquí las ligas: Regina: 2 de octubre no se olvida; Mariana, la viuda olmeca; Muertes de Aurora; Esa luz que nos deslumbra y La noche de Tlatelolco.
Estimado lector, espero sus comentarios al correo que viene más abajo. Nos leemos la próxima semana, que #HablemosDeArqueología.
NOTA: Todo lo aquí expresado, es producto de investigaciones formales, realizadas por varios profesionales, principalmente de la arqueología, así como de otras áreas académicas formales, con el afán de complementar el conocimiento aquí vertido. Las imágenes mostradas son extraídas, en su mayoría, de la revista Arqueología Mexicana y otras, tomadas del internet.
Cada artículo e imagen en estas crónicas, no tiene intención de dañar NI ofender ninguna posición política o religiosa. Son opiniones meramente científicas.
Los hipervínculos que aparecen son, normalmente, artículos de mi autoría y/o referencias necesarias para ampliar el tema.
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