Atención Diputados Locales
Desde hace muchos años a alguna autoridad se le ocurrió que el alumbrado público de las ciudades lo pagaran sus habitantes, y como resultaría muy difícil andar tocando casa por casa para cobrarlo, decidieron pedirle a la CFE (comisión federal de electricidad) que incluyera en sus recibos una cantidad por concepto de alumbrado público, y le llamaron pomposamente “Derechos de Alumbrado Público”, o sea, el famoso DAP.
Entonces, lo primero que hay que aclarar es que el DAP no es un ingreso de la CFE, ya que esta sólo funge como intermediaria entre el ciudadano y el gobierno municipal, es como un cajero del municipio para mejor entendernos, y es que hemos escuchado a presidentes y a tesoreros municipales decir que “la CFE cobra muy caro el DAP”, evidenciando un total desconocimiento del tema o simplemente porque le quieren echar la culpa a la paraestatal de un cobro municipal.
El pago que cada ciudadano tiene que hacer a la CFE por su consumo de energía eléctrica es otra cosa muy diferente al DAP, que no es más que un cobro municipal, así como lo está usted leyendo, MU-NI-CI-PAL, no federal ni estatal.
La ley orgánica municipal en su artículo 167 señala con toda claridad cuáles son los servicios públicos municipales, es decir, los que son a cargo del municipio, y en su fracción segunda está el alumbrado público, y si bien el artículo 173 de la citada ley menciona que el ayuntamiento celebrará convenios para su prestación y cobro, eso no le quita la característica de servicio público a cargo del municipio.
¿A dónde van todos estos comentarios?, pues a una conclusión que los diputados estatales desde hace años se niegan a reconocer, es decir, a que el costo de consumo de energía eléctrica del alumbrado público lo debe pagar directamente el municipio y san se acabo, así de simple y claro.
¿y porque lo anterior?, pues porque el alumbrado público es un gasto municipal, así como los sueldos de los policías y tránsitos, el arreglo de las calles o la recolección de basura, o ¿hay alguna diferencia? Verdad que no?, entonces, ¿Por qué vamos a pagar los ciudadanos este gasto si ya contribuimos con el impuesto predial y otros pagos?,
Además recordemos que también pagamos impuestos federales tales como el ISR y el IVA, de los cuales una pequeña y notoriamente insuficiente parte se regresa a los municipios.
Por todo lo anterior la propuesta que hacemos desde estas líneas a los diputados del congreso del estado es perder el miedo, y en un acto de justicia elemental, eliminar de una buena vez el cobro del alumbrado público a través del DAP a los ciudadanos, y que los presidentes municipales se rasquen con sus propias uñas y busquen mejorar sus ingresos y disminuir sus elevados e injustificados gastos para que les alcance para cubrir un gasto municipal como lo es la energía eléctrica del alumbrado público.
Y para empeorar las cosas, resulta que los diputados locales le están haciendo la tarea a los municipios y preparan una modificación al cálculo del DAP que iniciará en enero de 2020 y obvio, es para cobrar más y “apoyar” a los pobres municipios.
Y sé que esta propuesta parecería una cosa de locura, y los presidentes municipales dirían que, como decía nuestro amigo Manolo (del restaurante Manolo), “se irían a la quiebra”, pero si se hace un análisis simple y ciudadano, este es un gasto que lo deberían haber pagado los municipios desde siempre, o no?