Esta semana comentaré “Tragicomedia Mexicana 3. La vida en México de 1982 a 1994”, el último de la serie que tuvo a bien escribir el autor José Agustín, siempre con esa investigación profunda y esa crítica mordaz que le caracteriza.
Para este gran análisis que hace el autor, no se olvida de la importancia de todas las expresiones culturales que rodean la Historia de México de esos doce años tan singulares que nos tocó vivir a los mexicanos. Platica historias e incongruencias que rodean a la política mexicana. Para este momento, los adjetivos tan sutiles y agresivos para definir a los políticos, ya no sorprenden.
Doce años de muchas bajadas y pocas subidas. Muy pocas. Quienes los sufrimos en carne propia, no teníamos descartado un gran colapso, pero como siempre sucede, en nuestro país, “nunca pasa nada”. Más en aquellos oscuros tiempos, en los cuales no había de dónde escoger.
El primero de los capítulos (1982 – 1988), que intitula “La caída del Sistema”, corresponde al gris mandato de un personaje igual de gris (Miguel de la Madrid), salvo por varios sucesos nefastos que le tocó vivir y que enlisto a continuación, sin que lo haga en orden prioritario, más bien como me voy acordando y haciendo coraje. La primera que se me viene a la mente es la rampante devaluación que nos traía “locos” a los mexicanos (y algunos creen que no hemos vivido un asunto económico tan crítico como el de la Venezuela actual). ¿Recuerdan que Portillo dejó el dólar con una paridad de $74.00? Pues este grisáceo presidente la dejó, a su salida en $2,278.00. Sí. ¡Aunque Ud. estimado lector, no lo crea! A este “huevos de paloma” (según José Agustín), le sumamos la tragedia de San Juanico, esa explosión en la frontera norte de la CDMX y el EDOMEX. Quiso remediar la situación económica que nos devoraba, con pactos económicos entre las cúpulas empresariales y el gobierno, que nada más no subsanaba la situación. Al contrario. Todos esos problemas económicos acarrearon un “CRACK” en la bolsa de valores que se veía venir, y esto abrió las puertas del desconcierto. Y entonces todos fuimos “millonarios”, y claro que no por la abundancia económica. Ejemplos podría dar muchos, pero mejor le invito a que lea el libro y se entere. El impacto más fuerte de ese sexenio fue un tremendo fraude, a la vista de todos, en donde se impuso a uno de los personajes más perversos de la política mexicana, que a la fecha sigue dando patadas de ahogado, para no perder “su reinado”. Todo esto sucedió gracias a la “Caída del Sistema” que se fraguó desde la Secretaría de Gobernación con Manuel Bartlett al frente. Sí, el mismo que hoy es el titular de la CFE.
El segundo capítulo, lo intitula “El espejismo” (1988 – 1994), y en este el protagonista es Carlos Salinas de Gortari, que aún sigue en la escena política, con el total cinismo que lo caracterizó durante su mandato, y aún después de él, tratando de influir una y otra vez en las decisiones políticas. Su llegada “sorpresiva” a la presidencia, vino a marcar más el de por sí grave problema del neoliberalismo iniciado con Portillo. Se afianzaron más los lazos de los políticos y de otros personajes importantes de la cúpula eclesiástica con el narcotráfico. Y cuando el siniestro Salinas ya creía que todo estaba a su favor y a su gusto, el 1º de enero de 1994, le estalló una crisis social muy singular. También el magnicidio del candidato, casi presidente, Colosio. El asesinato de un Cardenal; también del Presidente de su partido político ordenado por gente muy cercana a él; la “genial idea” de eliminar tres ceros al peso, para equipararnos más o menos a la paridad de los socios comerciales que estrenábamos ese mismo 1º de enero en que entrabamos a la “modernidad salinesca”, con un tratado comercial a todas luces disparejo. Así que la paridad para cuando ya se iba este personaje, de los $3,329.00 que estaba justo al irse, quedó en $3.30. De esas soluciones a la “mexicana”, que además todos aplaudieron. Así que el día de hoy, estimado lector, la paridad real es de $22,000.00. Cosas “dramáticas” de la política mexicana. Y dejando al siguiente gobernante ya puesto en la silla, a los veintiún días, la devaluación nos pegó hasta $9.35.
Los movimientos sociales que ya se habían iniciado desde algunas décadas anteriores, en el final de los 80’s del Siglo XX y la década de los 90’s, tomaron una fuerza inaudita que culminaron con la caída del partido en el poder en el año 2000.
Pero esa historia la tendrá que leer en alguna otra obra, y le sugiero que sea una muy crítica, y no sirva a los intereses de esos políticos “trinqueteros”. Le recomiendo de entrada “Nueva Historia Mínima de México” de El Colegio de México.
Le vuelvo a sugerir de manera muy especial, que se adentre en esta joya de la historiografía mexicana, y que profundice, de una manera divertida como ha sido nuestra TRAGICOMEDIA MEXICANA, y que deje a un lado a “comentólogos”, “opinólogos” y “comediantes” que creen que saben de historia de México. Sí, de esos que solo analizan “lo bonito” o aseguran que saben. Esos personajes, que son como un cáncer.
Existe una serie de programas que realizó el Canal 22 junto con José Agustín, en los que en pocos minutos, el escritor relata cada capítulo de los tres libros. La puede encontrar en Youtube. Se la recomiendo. La siguiente liga, corresponde al primero de esos capítulos. 1940 a 1946:
https://www.youtube.com/watch?v=sTSUOHmDRw8
La próxima semana la recomendación será “Pedro y el Capitán”, de Mario Benedetti. Una obra escrita para ser representada en teatro, que da cuenta de la insana relación que surge entre un torturado y el torturador.
Estimado lector(a), espero su comentario al correo que viene al final del artículo. Después que tenga oportunidad de leer esta pequeña crónica, o mejor, si lee la obra, le solicito me haga favor de honrarme con su opinión, y de esa forma podamos compartir las sensaciones que le provocó esta recomendación.
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