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jueves, abril 25, 2024

Ni es política, ni es correcta

Sinceramente ya nada me sorprende en el tema del actuar de los partidos políticos y muchos de sus distinguidos militantes.

Estoy cierto que si nos remitimos a los principios sobre los que fueron constituidos, fácilmente nos enamoramos de cualquiera. Sí, de cualquiera.

Todos hablan de justicia, de equidad, de defensa de los Derechos Humanos y de progreso y bienestar para todos. Todos son verdaderos poemas de Nación y Comunidad.

Hasta ahí todo está increíble, el problema es cuando ya no hay poesía y toca turno a su quehacer diario. Ahí ya nos damos cuenta que nada tienen que ver con su esencia.

Mucho –si no es que casi todo-, es culpa de la gente que los integra y sobretodo, la gente que, en su interior, los maneja a su antojo y de acuerdo a sus propios intereses.

El tema es que, díganme si no, la agenda de todo el país está secuestrada y subyugada a los intereses de los partidos políticos. Eso es muy grave, pero igualmente grave resulta que los propios intereses de los partidos están a expensas de las ambiciones personales de ciertos personajes que al interior de los Institutos Políticos mueven los hilos.

El resultado es que nuestro país, su desarrollo y progreso, está totalmente ligado a los intereses personalísimos de algunos cuantos personajes que con tal de seguir dentro del Sistema, están dispuestos a, literal, darle en la torre al país y su gente, sin que siquiera les importe. Eso además de carente de ética, es un crimen, pues hay gente sin trabajo, sin acceso a la salud, sin servicios mínimos, niños sin escuela. A poco creemos que la escalada de violencia que tenemos hoy en día es un tema exclusivo de policías y ladrones. ¡Claro que no!, una población sin expectativas y oportunidades se las generará por si sola, aunque éstas no sean las más honestas.

Por eso, entiendo –que no justifico y por el contrario me parecen terribles- claramente a los denominados chapulines y las alianzas que pareciera no tienen un punto de convergencia. Y digo pareciera pues sí lo tienen: el hecho de conservar o acrecentar su participación en el poder público, sin detenerse en nimiedades para ellos tales como la ética, la honestidad y la verdadera vocación de servicio. Quieren el poder a pesar de todo y no están dispuestos a perderlo, aún a costa de percibirse cínicos y ambiciosos, además de llevarse entre las patas al país.

Por eso hoy tenemos alianzas como la del PAN-PRD –que alguien les avise a los Panistas que el PRD tiene una agenda claramente progresista- y por el contrario, avísenle al PRD que dudo que Acción Nacional apoye los matrimonios entre personas del mismo sexo, el aborto, la eutanasia, etc. Es curioso que hace unos cuantos meses se daban hasta por debajo de la lengua y hoy son cuasicompadres. Lo mismo pasa con la alianza MORENA-PES, este último partido fue fundado por la comunidad cristiana en México. La verdad es que ni la burla perdonan. Podrán decir que es una forma ecléctica y novedosa de hacer política pensando siempre en el bienestar de México. Yo pienso que hacen tan evidente su ambición desmedida y poco ética del poder que me dan náuseas.

En el caso de los chapulines hay muchísimos ejemplos de los intereses personales por encima de los grupales. Los que hoy abandonan los barcos partidistas para volverse “independientes” no son más que unos egoístas, pues durante mucho tiempo se beneficiaron de su partido, logrando incluso cargos públicos. Mientras eran parte de los beneficiados no creo que se quejaran de la gente que debajo de ellos no podía llegar a determinados puestos o candidaturas. Mágicamente cuando no les tocó a ellos lo que buscan, brincan a otro partido o a la vía independiente. Eso me parece una falta de respeto para el resto de los militantes de su Partido Político. Dejan en claro que en general el ADN de los políticos contiene una altísima dosis de ego y una firme convicción de que no hay nadie que pueda estar por encima de sus intereses.

Otro caso increíble es el de Gabriela Cuevas, emblemática militante de Acción Nacional. A sus 38 años ya fue Asambleísta en el entonces Distrito Federal, Diputada Federal, Jefa Delegacional en Miguel Hidalgo y hasta este momento Senadora de la República. Hoy es la Dirigente de la Unión Interparlamentaria, agrupación que congrega 173 Parlamentos del mundo. Su cargo -de 2017 al 2020- presenta una condición sine qua non y es el hecho de seguir siendo ella misma legisladora. Su cargo como Senadora concluye el 31 de agosto de este mismo año. El PAN no le aseguraba una Diputación Federal plurinominal, por la razón que sea. Entonces mágicamente su otrora enemigo Andrés Manuel López Obrador, le abre las puertas de MORENA de par en par y le ofrece la Diputación Federal. Gabriela Cuevas, mujer combativa perdió la brújula de su propia dignidad y hoy abandera la bandera que tanto criticó durante años.

Así las cosas, tratándose de la política correcta, ni es política ni es correcta.

 

*Eric Bolívar Alonzo es abogado especialista en Derechos Humanos, activista en apoyo a migrantes centroamericanos, colaborador voluntario de la Fundación TELETÓN, columnista, fotógrafo; actualmente dirige Donadores Compulsivos Guanajuato A.C., dedicada a promover la donación altruista de sangre y plaquetas.
Correo electrónico: Ebolivar1975@gmail.com.

Eric Bolivar
Eric Bolivar
Abogado especialista en Derechos Humanos, activista en apoyo a migrantes centroamericanos, colaborador voluntario de la Fundación TELETÓN, columnista, fotógrafo; actualmente dirige Donadores Compulsivos Guanajuato A.C., dedicada a promover la donación altruista de sangre y plaquetas. Correo electrónico: Ebolivar1975@gmail.com. Twitter: @eric_bolivar

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