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sábado, abril 20, 2024

Atropello y Negligencia

“Y es que todo en el espot es indignante: la forma burda, el fondo infame, el tonito condescendiente y, sobre todo, la idea subyacente de que el ciudadano sólo sirve para pagar impuestos y callarse, sin pedir cuentas ni estorbar ni manifestar ningún tipo de descontento. Pues no, señores; se acabó lo que se daba. Se acabaron los tiempos en que se podía hacer y decir de todo y aquí no pasaba nada. Para decirlo en términos que ustedes entiendan: no pagamos para que nos peguen. Posestos.”

Juana Inés Dehesa (Berrinches, Reforma 16/10/2015)

 

El atropello

Lo visto en la semana que ha pasado en el campo de los absurdos de la política nacional, nos tiene que animar como dice Juana Inés Dehesa “Pues, no señores; Se acabaron los tiempos en que se podía hacer y decir de todo y aquí no pasaba nada”. El descaro del gobierno federal de sostener a Arturo Escobar al frente de la Subsecretaria de Prevención del Delito de la Secretaria de Gobernación muestra que las autoridades desde el presidente pasando por Miguel Ángel Osorio Chong no solo no quieren escuchar a las organizaciones y a los ciudadanos que han pedido su destitución. El acto macabro, apropósito de la temporada, de anunciar por este mismo funcionario, que hizo su declaración patrimonial, pero que no la dará a conocer y que teniendo conflicto de intereses que reconoce, tampoco está dispuesto a hacerlos públicos.

Se sabe que Escobar y Vega para contrarrestar las críticas después de su nombramiento, ha contratado servicios de “robots” para que en las redes sociales salgan organizaciones y personas fantasmas a apoyarlo. “Ante ello organizaciones civiles, ciudadanas y ciudadanos con una larga trayectoria en diversas áreas de los derechos humanos insistieron en que Arturo Escobar además de desconocer sobre la materia relacionada con la Subsecretaría de Prevención y participación ciudadana, no es un servidor público confiable, no practica los principios éticos democráticos necesarios para impulsar la prevención social de las violencias y la participación ciudadana; no cuenta con ninguna cualidad personal para el cargo”.

Se dio a conocer también la semana pasada, a partir de una investigación de un reportero en los Estados Unidos, que Arturo Escobar tiene una propiedad valuada en cerca de 5 millones de pesos en un fraccionamiento en San Antonio, Texas. El punto, es que es una de las propiedades que no declaró y que rápidamente se empezaron a ser cuentas de los salarios percibidos durante su trayectoria como legislador del Partido Verde y todo apunta que no cuadran los ingresos con los gastos.

Sin duda, el proceder del equipo de la presidencia de la república responde a los favores recibidos en el pasado proceso electoral y su papal de comparsa que las y los diputados del verde hicieron en la Cámara de Diputados pasada y en el actual trabajo de golpeteo a los partidos políticos PAN, PT y PRD en el Senado. El problema es que la credibilidad del gobierno sigue cayendo y el en enojo social crece.

El atropello se instala como práctica, el spot difundido en el canal de youtube de la presidencia, que apenas duró unas horas “al aire”, que elaboró la oficina de comunicación social de Peña Nieto y que usa el eslogan “ya chole, con tus quejas”, refuerza lo que hemos venido diciendo en este espacio sobre la intolerancia del nuevo PRI que gobierna el país y que sigue empecinado en usar el autoritarismo como forma de gobernar y regresar al viejo PRI. Beltrones, Monroy, Gamboa y Salinas son las manos que mecen la cuna.

La negligencia

Los feminicidios en Guanajuato han aumentado en las últimas semanas. Los casos nos demuestran que es un problema grave, serio y que requiere acciones coordinadas, integrales y con una política criminal con perspectiva de género para poder detener este delito por parte del gobierno de Guanajuato.

El gobierno sin duda ha hecho algunas acciones, no se puede afirmar que no han hecho nada, lo que sí es evidente es que es a todas luces insuficiente. Los esfuerzos realizados son unas cuantas pinceladas en una realidad oscura y llena de negligencia. El sistema de justicia no opera como debiera ser por una parte. Es muy grave porque todavía pese a los esfuerzo de capacitar a ministerios públicos y a algunos cuerpos de policía de unos cuantos municipios, el hecho cotidiano es que se relativiza la violencia que viven las mujeres en Guanajuato y con ello se deja de actuar, se engaña a las mujeres que piden protección y no están operando todas las medidas preventivas y cautelares como debiera ser.

Lo más grave, es que producto de las visiones particulares que se tiene en Guanajuato, desde los grupos de poder y del partido en el gobierno, sobre lo que son las mujeres, sobre cómo se les ve y cómo se les valora, es que deciden implementar algunas acciones a su manera, – a su ideología-   que en lugar de ayudar a reconocer la calidad humana y su dignidad como personas por ser mujeres y a diseñar políticas públicas y a implementar programas que garanticen su protección y la vigencia total de los derechos humanos que ellas tienen.

La realidad es que en las acciones, programas, campañas que implementa el gobierno del estado, las sigue colocando a las muejres solamente como amas de casa, exaltando la maternidad casi como única cualidad y los programas de atención están cargados con una visión familiarista, que las ubica en el cuidado de los hijos e hijas como única responsabilidad, no las puede valorar positivamente como trabajadoras, empleadas, como jefas de familia, como profesionistas, como estudiantes, como personas que tienen aspiraciones y necesidades de diversión, de recreación, de autonomía y de ser tratadas como iguales a los hombres, como lo marcan las leyes del estado.

Pareciera que la frase del gobernador Miguel Márquez “de menos Yunque y más PAN” que expresó cuando ganó la elección para gobernador, en este tema de los derechos de las mujeres no aplica. Todo indica, desde los hechos, que para la visión conservadora que representan ambos grupos en y dentro del poder, las mujeres no son importantes en la vida social y pública y que sus derechos son algo que se puede postergar. Ahí hay omisión, pero sobre todo negligencia. No podemos aceptar como normal la violencia contra las mujeres y las niñas y no podemos aceptar ningún feminicidio más en Guanajauto.

 

Arturo Mora Alva
Arturo Mora Alva
Biólogo por la UNAM, Mtro. en Educación por la UIA León, Doctor en Estudios Científico Sociales por el ITESO con especialidad en Política. Profesor Universitario en todos los grados. Investigador Social, Consultor y Analista.

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