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viernes, abril 19, 2024

¿Reforma Educativa?

“No hubo proyecto de reforma educativa. Solo se planteó una nueva relación con el SNTE”.
Manuel Gil Antón

 

Lo que estamos viviendo que sucede en Chiapas, Guerrero y Michoacán como parte de las protestas de los maestros y maestras de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, es producto de la llamada Reforma Educativa que impulso Peña Nieto y su equipo dentro lo que se llamó el Pacto por México, los tres principales partidos son responsables de lo que es una mera reforma laboral que funda o busca fundar una nueva relación con el Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación y cuya líder sigue encarcelada por diversos delitos, pero que ella, como líder sindical, legisladora y dirigente del PRI nacional, representa lo que fue y es la cúpula política de este país.

Los líderes sindicales que fueron y son parte de la estructura de poder del PRI a través una estrategia corporativista del llamado sindicalismo oficial, que ha creado líderes históricos como lo fue Fidel Velázquez y como lo que son ahora todavía Carlos Romero Deschamps, Víctor Flores, Manuel Vallejo Barragán, Juan Díaz de la Torre y Napoleón Gómez Urrutia, junto con muchos otros, que han servido a los intereses sectoriales y electorales del PRI

La reforma educativa se ha centrado en la evaluación del magisterio y las consecuencias de los premios y recompensas, y ha marcado las consecuencias sobre de los resultados no satisfactorios que obtengan los y las maestras, así como, las implicaciones para quienes no han aplicado la evaluación.

La evaluación sobre los aprendizajes de las y los alumnos que están dentro del Sistema Educativo Nacional, fueron suspendidas. Los resultados de las pruebas ENLACE y PISA habían mostrado el tamaño de la crisis educativa en cuanto a las competencias de lectura, escritura y habilidades de aritmética y matemáticas. El 60% de los estudiantes después de 12 años de escuela, no saben leer y escribir con suficiencia. La Reforma Educativa no atendió el problema educativo que tenemos en el país, sino que solo ha servido como pretexto para establecer una nueva relación de poder con el SNTE, que hoy es comparsa del PRI y del proyecto de control del gobierno actual y que ha logrado polarizar aún más la tensa relación con la CNTE, que desde hace muchos años había buscado salirse del control sindical del Elba Esther Gordillo.

La mano dura del nuevo Secretario de Educación, amigo del presiente Peña Nieto es festejada por muchos sectores y grupos que ven en la intransigencia de Aurelio Nuño, la fuerza que no tiene el propio primer mandatario.

El problema educativo es más que grave. Cerca de 6 millones de mexicanos y mexicanas son analfabetas –en donde mujeres e indígenas son la mayoría-. El rezago educativo empieza ahí. Cerca de 11 millones personas en el país no cuenta con la primaria terminada y poco más de 17 millones de ciudadanos y ciudadanas no tienen los estudios de secundaria concluidos, es decir poco más del 43% de la población entre 15 y 64 años están en condición de rezago escolar. En resumen el promedio educativo es 8.8 años, de 10 que corresponden a la educación básica, -uno de prescolar, seis de primaria y tres de secundaria-. La reforma educativa se centra en uno de los actores del proceso educativo, pero deja de lado la verdadera catástrofe educativa que tenemos. Hay un excelente documento del INEE sobre “Los Docentes en México: Informe 2015”. Pero parece que el actual Secretario Nuño no lo conoce o mejor dicho no lo quiere conocer, esto se puede afirmar a partir de sus acciones y de sus declaraciones.

Toda esta situación impacta al rezago que también se presenta en el sistema de educación media superior y en la educación superior. La situación no es menos alarmante. La oportunidad de aprovechar el bono demográfico se le fue de las manos a todo el gobierno, la educación de calidad y la capacitación se quedó en el olvido. La cobertura educativa es otro tema importante, cabe señalar que el 44% de los y las niñas que estudian la primaria lo hace en escuela multigrado o en escuelas incompletas, en donde queda en evidencia la falta de salones y docentes para atender la demanda de educación básica.

Lo más dramático y por demás triste, es que el Sistema Educativo Nacional expulsa a un millón de alumnos y alumnas al año, incrementando el rezago escolar. Si el calendario escolar es 200 días, cada día 5,000 estudiantes quedan fuera de las oportunidades de estudiar, como lo ejemplifica Manuel Gil Antón. Unos por que abandonan la escuela, -no tienen los recursos para seguir estudiando-, otros porque la escuela los abandona a ellos y a ellas, no hay donde seguir estudiando, la secundaria más próxima está lejos, la preparatoria o el bachillerato es un mera ilusión para millones de jóvenes, además de que las y los legisladores hicieron ya obligatoria la educación media superior, -a partir del 9 de febrero de 2012-, y no está a la vista la propuesta para cómo atender la demanda educativa en ese nivel en el futuro próximo.

El gobierno y sus instancias no logran ver la situación de las escuelas, la falta de recursos, de infraestructura: salones, libros, energía eléctrica y agua potable, sanitarios, no digamos de tecnología y recursos de comunicación. Va desde la falta de patios y espacios deportivos adecuados. Con todo ello, la falta de apoyo e inversión en las normales, en las normales rurales, a la Universidad Pedagógica Nacional, es decir la falta de visión para desarrollar un programa nacional de formación docente de largo plazo, que responda a los retos de los cambios en los paradigmas educativos y que responda a las nuevas demandas de la competencias sociales, cognitivas y laborales.

Está el tema de las condiciones laborales de los docentes. La situación de los docentes indígenas y no indígenas muestra profundas desigualdad, por ejemplo. La situación de los salarios en general para los profesores y profesoras se ha mantenido estable según los incrementos anuales oficiales, pero lo que es cierto que Programa Nacional de la Carrera Magisterial no ofrece avances en el tiempo, es decir en la trayectoria docente para tener incrementos que estimulen su adecuada preparación y compromiso con la enseñanza tal como pretende la Ley General Servicio Profesional Docente. También está el impulso para que jóvenes –hombres y mujeres que egresan de la educación media superior, vean en la carrera magisterial una opción vocacional y que tengan un clara y segura expectativa de ingresos competitiva con otras profesiones para decidir el dedicarse a la docencia.

La realidad es que la reforma educativa es una reforma de apariencia. Manuel Gil Antón investigador del Colegio de México, lo ha dicho con la metáfora del chofer del autobús: La reforma educativa busca sólo cambiar al chofer de un autobús, ponerle uniforme y hasta una corbata, pero el autobús es viejo, sin mantenimiento, tiene los vidrios rotos, con malas llantas, además va en camino de terracería, en una brecha, va de subida y sin un destino claro.

Lo que se necesita es una reforma educativa real, efectiva, profunda, con visón de estado y con acciones de corto, mediano y largo plazo. Con una suficiente y transparente inversión para atender todo, es decir, cambiar el camión, ponerle llantas, definir un destino y capacitar y dignificar al chofer y atender la realidad de sistema educativo reconociendo la profunda inequidad, la desigualdad, a la vez de atender de forma diferenciada, a las poblaciones que no han visto en la educación una oportunidad de desarrollo social e integral, además de tener acceso a una vida digna.

Chiapas, Guerrero y Michoacán son el ejemplo de años de olvido, de miseria, de poder del SNTE y de injusticia social. No basta con la represión policiaca o el linchamiento social en los medios de comunicación de la CNTE, ni tampoco es con la mano dura de Nuño Mayer que se resuelve el desastre educativo del país, y más ahora se le festeja su postura de fuerza, con lo que lo apuntalan desde ahora para la carrera presidencial de 2018.

Arturo Mora Alva
Arturo Mora Alva
Biólogo por la UNAM, Mtro. en Educación por la UIA León, Doctor en Estudios Científico Sociales por el ITESO con especialidad en Política. Profesor Universitario en todos los grados. Investigador Social, Consultor y Analista.

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