“A los amigos, justicia y gracia; a los enemigos, la ley a secas”, frase de Benito Juárez pronunciada por uno de los abogados de la familia del Chapo Guzmán en conferencia de prensa para agradecerle al presidente de México, su gran calidad humana por no haber procesado a Ovidio Guzmán, uno de los hijos del narcotraficante más famoso de México en los últimos tiempos.
Esto resultó de los acontecimientos vividos en esta semana en Culiacán, Sin., hechos que han dividido a la opinión mexicana; por un lado tenemos los que reprueban el actuar de las autoridades federales por sus contradicciones desde el primer momento en las versiones, el ocultamiento de información en torno a la posible detención y paradero de Ovidio, la mentira al decir que había sido un patrullaje de rutina, cuando los videos en redes sociales evidenciaban que había sido lo que al final se aceptó, un operativo para cumplimentar una orden de aprehensión; “benditas redes sociales” dijera el presidente, pues se puso al descubierto la falta de planeación como de previsión en el actuar de las autoridades de seguridad, quienes terminaron por aceptar que no midieron la reacción de los grupos de sicarios armados para defender a su líder y que para no poner en riesgo a la sociedad civil, a los familiares de los militares que estaban rodeados y a los soldados secuestrados, se había optado por entregar al hijo del Chapo para calmar las aguas. Sin embargo, esto último es aplaudido por algunos, quienes ya no quieren más sangre derramada de soldados, de sicarios y menos de gente inocente, afirmando que fue buena decisión, como dijera el presidente “la detención de una persona no ameritaba poner en riesgo las vidas de la sociedad civil” además de que “el fuego no se combate con fuego”.
Derivado de los acontecimientos escuché diversas preguntas entre la gente tales como: ¿eso fue lo mejor?, ¿por qué no se exterminó a los sicarios, si ya habían salido de sus madrigueras y estaban en las calles poniendo en jaque a la ciudad?, ¿por qué no llegaron la Marina y demás fuerzas del orden a reforzar las acciones para terminar de una vez por todas con ese mal que daña a la sociedad?
Muchos personajes de la política expresaron su malestar ante estos acontecimientos, por ejemplo la diputada del PAN, Adriana Dávila, quien tomando la tribuna en San Lázaro junto con su bancada, pidió la renuncia del gabinete de seguridad porque no se puede permitir la rendición del Estado Mexicano ante el narcotráfico, incluso dijo que el presidente es un cobarde y si no puede gobernar que renuncie.
Así las cosas y como todo en México se encuesta en los últimos tiempos, llegó a mis manos el resultado de una consulta telefónica de la empresa Massive Caller sobre los hechos ocurridos en Culiacán, Sin., este jueves; la pregunta fue: ANTE ESTOS HECHOS, ¿CUÁL ES SU OPINIÓN SOBRE LA DECISIÓN DEL GOBIERNO FEDERAL Y DEL PRESIDENTE DE MÉXICO? Según los resultados de la encuesta el 18.7% de los encuestados respondió que fue una decisión valiente, el 27.1% respondió que fue una decisión prudente, mientras que el 54.2% afirma que fue una decisión cobarde. Dicha encuesta fue realizada a 1000 personas, bajo una metodología telefónica, dirigida a hombres y mujeres mayores de 18 años, con un tipo de muestreo representativo-cuantitativo realizándose a números telefónicos de México.
La forma de gobernar del presidente ha dado mucho de qué hablar, su estilo es único rompiendo paradigmas, al extremo de decirles a los malos que los acusará con sus mamás y abuelitas. Por esas palabras, viene a mi mente que el Apóstol de la 4T es muy querido y respetado por la mamá del chapo Guzmán, abuelita de Ovidio, recordemos que le mandó una carta donde le pidió ayuda para obtener una visa humanitaria para ir a los Estados Unidos de Norteamérica a visitar a su hijo, lo que el presidente apoyó, logrando viajar con dos de sus hijas a visitar a su vástago a ese país. Será por eso que en la rueda de prensa de los abogados de la familia del Chapo, dieron las gracias al presidente por la liberación de Ovidio Guzmán además de respaldar la 4T y acusar a otros de generar el caos en Culiacán para hacer quedar mal al Presidente. Sólo falta que nos den la sorpresa que la mamá del chapo y abuelita de Ovidio ponga orden en el cártel de Sinaloa, fincando las bases para la pacificación del país, a cambio de indultos por las atrocidades cometidas, todos a portarse bien, donde el dinero obtenido por temas de ilegalidad se invierta en el bien de la Nación, un borrón y cuenta nueva, ya que el presidente afirma que la gente de México es buena.
El lunes 14, el secretario de seguridad pública federal dio a conocer el Informe Nacional que refiere el vivir en una crisis de inseguridad crónica con 33 millones de delitos, casi 25 millones de víctimas durante 2018 y un 67.2% de la población que considera la inseguridad como el problema más importante. En dicho documento Guanajuato ocupa el 6to lugar en déficit de elementos policiacos, pues por el número de habitantes superior a los 5.8 millones deberíamos tener 17,561 efectivos y sólo contamos con 9,639 sumando todas las corporaciones. El ejecutivo estatal debería voltear y apoyarse aún más en su Poder Legislativo, sobre todo en el tema presupuestal proponiendo ajustes a la baja del gasto superfluo para reencaminarse al tema que nos preocupa a todos y contratar más efectivos.
Un buen enlace es el Diputado Rolando Alcantar, presidente de la Comisión de Seguridad Pública, buen gestor de causas sociales, que sabe escuchar, buen negociador y hombre de paz; no por nada la gente lo aprecia y respeta, muestra de ello se vio en el informe que rindió en días pasados junto a sus compañeros de León por la bancada panista, sorprendió por ser el más reconocido con aplausos de los asistentes. Esperemos que esto sea el inicio de los cambios de actitud que necesita nuestro estado en los funcionarios públicos.
