Por: Luis Carlos Sánchez Díaz
El sistema pericial desempeña un papel fundamental en el sistema de justicia mexicano, proporcionando pruebas científicas y técnicas que respaldan la toma de decisiones judiciales. Sin embargo, la eficacia y la confiabilidad de este sistema se ven afectadas por una serie de condiciones que requieren una atención urgente en todo el país.
De igual manera, la grave situación de violencia, mortandad y desapariciones requiere esfuerzos acelerados para la identificación forense y el almacenamiento de cadáveres y restos humanos que cada día se acumulan en las unidades de servicios periciales y/o de servicio médico forense.
En el mes de abril, el INEGI publicó los resultados del informe “Servicios periciales” los cuales brindan información estadística para comprender la estructura organizacional, recursos y desempeño de las unidades encargadas de dichas funciones en el ámbito federal y estatal.
En cuanto al presupuesto destinado, la Fiscalía General de la República(FGR) ejerció un presupuesto de 1,370 millones de pesos, mientras que, en las unidades estatales, el total fue de 2,719 millones. Respecto al personal y equipamiento, para el almacenamiento de cadáveres y/o restos humanos con el que contaron los anfiteatros de la FGR y de las unidades estatales, al cierre de 2021, se informó que se encuentran 1,843 personas adscritas a las tareas por parte de la FGR, mientras que 11,926 a las unidades estatales. Del total, el INEGI informó que 10,957 son peritos, siendo la Ciudad de México, Estado de México y Chihuahua, las entidades que concentran la mayor proporción de los peritos. Para el caso de Guanajuato, la entidad informó que cuenta con 455 peritos adscritos a la unidad estatal y 31 a la FGR.
Respecto a las instalaciones, en 2021, se registraron a nivel nacional 974 laboratorios de los servicios periciales y/o servicio médico forense. Del total 837 (85.9%) eran fijos y 137 (14.1%), móviles. Además, se tiene registro de dos anfiteatros de la FGR y 246 de las unidades estatales, los cuales tienen una capacidad de almacenar a 6,581 cadáveres y/o restos humanos en cámaras de frío y a 4,576 en osteotecas. En el caso de Guanajuato, se cuenta con 5 cámaras de frío para almacenar cadáveres y/ o restos humanos con una capacidad máxima de 221 espacios, mientras que solo cuenta con una osteoteca y un espacio para sistematizar huellas dactilares, identificación balística y perfiles genéticos.
Ante este contexto, el sistema pericial en México se enfrenta a una grave escasez de recursos tanto humanos como técnicos. Colectivos, organizaciones sociales y las mismas fiscalías han denunciado que tanto el número de peritos como las instalaciones resultan insuficiente para dar respuesta a los retos en materia penal que enfrenta el país, lo cual también impacta en la calidad de los informes periciales que se presentan en las carpetas de investigación.
Así mismo, la identificación forense en México enfrenta diversos desafíos que afectan su eficacia y confiabilidad principalmente vinculados con la alta carga de casos y la falta de recursos, lo que dificulta la pronta resolución de los mismos. En 2021, a nivel nacional las unidades encargadas de los servicios periciales y/ o servicios médico forenses recibieron 92,590 cadáveres y/ o restos humanos (368 FGR y 92,222 unidades estatales). Del total, 87.5 % fue identificado, 12.1 % no fue identificado y 0.4 % estaba pendiente de identificación.
A nivel nacional, en 2021 se encontraban 8,738 cuerpos, 1,400 restos y fragmentos, 824 osamentas y 227 óbitos fetales sin identificar. Para el caso de Guanajuato las cifras son las siguientes: 125 cuerpos y 125 osamentas sin identificar, mientras que reporto cero casos de restos, fragmentos y óbitos fetales.
El incremento en la violencia y los delitos en muchas de las entidades del país ha generado que la demanda de servicios forenses se acrecenté y que en ocasiones no contemos con datos que permitan dar solución a la identidad de los cadáveres y restos humanos que se hallan en nuestro país, lo cual también puede provocar un subregistro en la incidencia de homicidios dolosos y culposos. Por ejemplo, a nivel nacional en 2021 de acuerdo al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, se registraron 43,976 homicidios dolosos y culposos y 981 feminicidios, sin embargo, el INEGI reportó 57,318 cadáveres y/o restos humanos a los que se les realizó alguna práctica forense, determinando que la causa de muerte fue accidental o violenta. Lo mismo ocurre a nivel estatal, por ejemplo, Guanajuato reportó 3,673 homicidios y 30 feminicidios, pero el INEGI informa que se determinó que 6,966 cadáveres y/ o restos humanos murieron de forma accidental o violenta.
Por último, es importante enunciar el destino de los cadáveres y restos humanos en nuestro país. Al cierre de 2021, 14,134 cadáveres y/ o restos humanos identificados y no identificados estaban almacenados en los anfiteatros estatales y federales. 2,267 cadáveres fueron inhumados en panteones, 751 almacenados en centros de resguardo forense y en el caso de 2,058 cadáveres no las fiscalías no especificaron su destino.
Como se demostró, la crisis humanitaria ante la alta carga de casos, la falta de recursos y la saturación de espacios para almacenar cadáveres dificulta la labor pericial en nuestro país. La identificación forense en México enfrenta desafíos significativos que deben abordarse para mejorar su eficacia y confiabilidad. La asignación de recursos adecuados, la mejora de la coordinación interinstitucional, la capacitación continua de los profesionales y la inversión en infraestructura y tecnología son aspectos clave para fortalecer este ámbito en el país.