Guanajuato. La guerra en Ucrania propiciará que en México incremente la demanda de vientres de alquiler, algo que no está normando. Así lo advirtió Juan Martín Pérez García, coordinador de Tejiendo Redes Infancia en América Latina y el Caribe.
Recordó que en Sonora en la administración de Guillermo Padrés se descubrió una red criminal de menores encabezada por el Sistema DIF, hospital regional, para quitarle sus bebés a mujeres indígenas pobres y esos bebés darlos en adopción a zonas en los Estados Unidos.

“Esto es una realidad, en tanto no tengamos una ley de adopciones. Vamos a enfrentar el gran problema de que los niños y niñas sean objetos de adopciones ilegales”.
Expuso que existen dos vertientes, muy peligrosas: el incremento de desapariciones de niñas y niños pequeños que posiblemente van a adopciones ilegales y la otra que es la industria de vientres de alquiler.
“Están explotando mujeres jóvenes para convertirlas literalmente en objetos de reproducción o gestante, estas granjas de mujeres jóvenes gestantes, tenía un paraíso en Ucrania, pero con la guerra se cayó el negocio”.
Dijo que esas empresas de Estados Unidos y Europa están encontrando en México y con el apoyo del crimen organizado un paraíso.
“Lamentablemente estos lobbys son muy numerosos y con dinero de por medio y ya han alcanzado a legisladores y a la propia Suprema Corte de Justicia”.
Indicó que la manera terrible con que se considera la adopción ahora será más rápido comprar un bebé en un vientre de alquiler, esto sin los molestos trámites.
“En los vientres de alquiler es comprar y vender un niño” sentenció.