Guanajuato, Gto. A pesar del llamado del rector de la Basílica de Nuestra Señora de Guanajuato, a no apodar “La Bruja” a una momia, la alcaldesa de Guanajuato, Samantha Smith, mantuvo su postura de minimizar la problemática, afirmando que el apodo es parte de “los usos y costumbres” de la capital.
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Aunque esta vez se dijo “abierta” a que se elimine el apodo, insistió en su argumento de que la población capitalina seguiría llamándole de esa forma, dando a entender que se trata de una “leyenda” que ya es parte de Guanajuato y que no se puede cambiar.
“Yo puedo decir que ya no se le llame Bruja, pero eso creo que ya está ahí en la idiosincrasia. Insisto: yo no me cierro y bueno, también el tema de nuestras momias, insisto: es un tema de usos y de costumbres, es un tema que se ha venido consolidando y que sobre todo lo más importante para mí es que se puedan conservar de la mejor manera”, comentó.
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Ya antes, la alcaldesa había reconocido su cercanía a la iglesia católica para gobernar, aludiendo a la libertad de expresión y a la “mística” de su gobierno.
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Smith reconoció la voluntad de apoyar la investigación con la que se sabrán los nombres de los cuerpos y la historia de las personas que fueron en vida, que contribuirá a eliminar el “morbo” en su exhibición.
“Mi visión es que más allá de un tema quizás de morbo que pueda ser, pase a un tema sí: de investigación científica, investigación que complemente quiénes fueron y creo que todo mundo hemos escuchado el tema de que «todas tenemos unas tías bien paradas en las momias”, dijo.
Comentó incluso que conoció a ciudadanos y ciudadanas que afirman estar relacionados con los cuerpos en exhibición. Sin embargo, sentenció que en la capital la ciudadanía “corre el riesgo” de convertirse en momia y ser exhibidos.
“Una de las características de Guanajuato es que en esta ciudad los habitantes se convierten en momias y corren el riesgo de ser exhibidos en el Museo de las Momias”, concluyó.
