Celaya, Gto. La mañana de este lunes se procedió a levantar el acta del estado en el que se encuentra la obra del Andador Perfecto I. Aranda como parte del proceso de rescisión de contrato en presencia de Javier Padilla Guerrero, propietario de la constructora Grupo Constructor y presidente estatal de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC).
El empresario no quiso hablar con los medios sobre el tema y dio indicaciones a su residente de obra, Antonio Espinoza, quien señaló que no han recibido los anticipos para continuar trabajando, mientras que el director de Obras Públicas, Juan Gaspar García Aboytes, aseveró que se le dio el 50 por ciento del costo de la obra.
El servidor público informó que entregó a la empresa, el pasado viernes, un oficio donde se le informó que se inició el proceso de la rescisión del contrato. Por tal motivo se procedió a hacer el levantamiento del acta de acuerdo de a las condiciones de cómo se encuentra la obra. La constructora tiene 10 días para aportar elementos a su favor y en base a eso se definirá si se continúa con el proceso de rescisión.
García Aboytes mencionó que el avance físico como administrativo es del 32 por ciento, además de que se le dio a la empresa un anticipo del 50 por ciento del costo del la obra, es decir un poco más de 2 millones de pesos. Además señaló que se han acercado a la empresa para pedirles que incrementen su fuerza de trabajo, sin obtener alguna respuesta y que independientemente del proceso de rescisión, se tendrán que aplicar las sanciones correspondientes.
“En caso de que se de la rescisión, la Dirección de Obras Públicas tiene la facultad de asignar la obra a otra empresa. Yo apelo a su cordura y que acepte las condiciones, porque él tiene, al final de cuentas, derecho de proceder a un amparo que podría alargar esta situación, pero si acepta y genera una autocrítica. Si no se pudo llegar al terminó de la obra, que nos dé la oportunidad de contratar una nueva empresa que acelere los trabajos y termine en los tiempos que la ciudadanía requiere”, finalizó.
Ante esta situación el ingeniero Antonio Espinoza, residente de la obra, mencionó que la prórroga de entrega de la obra que tenían era el 11 de diciembre del año pasado, y que una segunda no les fue aprobada por parte del gobierno municipal. Dijo que es importante porque si no se tienen fechas aprobadas legalmente por contratos y convenios modificatorios en tiempos, no se puede estimar.
“Estas estimaciones son lo que nosotros ejecutamos y podemos cobrar, si no lo podemos cobrar nos detenemos y vamos trabajando conforme a las posibilidades de los anticipos. Los dineros que se entregan al inicio son para pagos de compra de materiales e ir pagando los insumos diarios y la mano de obra, si no tenemos esa fluidez es muy difícil. Aquí es producir y cobrar, si no hay producción no hay cobro”.
En cuanto a lo señalado por el director de Obras Públicas de acercarse para pedirles que incrementen su fuerza de trabajo respondió que ha estado ahí como residente de obra, “No todo el día, pero si estamos, y si nos citan a una reunión estamos aquí; no podemos escondernos no se puede porque los compromisos existen”.
El residente recalcó que el existe el interés por parte de la empresa para terminar los trabajos, ya que no pueden decir simplemente ya no puedo, ya no quiero; tienen que continuar y terminar los compromisos.
Finalmente señaló que se tiene que establecer un compromiso de ambas partes, “nosotros ejecutamos si nos pagan, si no nos pagan seguimos en la misma situación porque no podemos continuar una obra si no hay fluidez de dinero, en los contratos está establecido que se pueden ingresar estimaciones cada dos semanas, se han ingresado pero no las pagan.
