Guanajuato. La Cámara de la Industria de Curtiduría del Estado de Guanajuato (CICUR) pidió al gobierno federal agilizar la importación de sulfuro de sodio, ante la crisis de abasto que enfrenta el sector desde marzo.
Vicente Lahud Martínez, presidente del organismo, explicó que la escasez se originó tras un accidente en la planta de un proveedor en Monterrey, lo que detuvo la producción nacional de esta sustancia clave para el curtido de pieles.

“Se está tratando de resolver con la importación del producto, pero generar la cadena para que estén llegando las cantidades necesarias es un poco difícil”, explicó Lahud.
Recordó que la industria requiere entre 25 y 30 toneladas diarias de sulfuro, es decir, alrededor de 600 toneladas al mes. Indicó que para garantizar el suministro constante.
“Nosotros necesitaríamos más o menos 15 contenedores que estuvieran llegando aquí a León, 15 en el puerto, 15 en el mar y 15 embarcando. Cuando logremos ese ciclo, vamos a estar en posición de resolver el problema”.

El líder industrial advirtió que la situación no se resolverá de un día para otro y que actualmente el mayor obstáculo es la lentitud en los procesos aduanales y regulatorios.
“Lo que le estamos pidiendo a las autoridades es que lo que esté llegando a frontera, por cualquier puerto, se libere rápidamente. La importación está tomando más tiempo de lo previsto”, señaló.
El líder empresarial recordó que el sulfuro de sodio está clasificado como sustancia tóxica, por lo que requiere autorizaciones especiales debido a que puede ser precursor de drogas o explosivos.
“Estamos trabajando con Cofepris, con Semarnat y con la Dirección de Aduanas para eficientar el ciclo logístico. No es lo mismo pedir un permiso para una materia prima común que para el sulfuro”, explicó.
Enfatizó que el desabasto ya ha impactado de forma generalizada a la industria del curtido, afectando especialmente a las micro y pequeñas empresas.

“Las empresas chicas que trabajan al día o que no tienen inventario, inmediatamente les pega. Prácticamente todas han tenido paros”, dijo el presidente.
El presidente de la Cicur advirtió además sobre el posible riesgo sanitario asociado al deterioro de los cueros sin un tratamiento adecuado, por lo que no sólo hay una afectación económica, sino ambiental.
“Muchos quitaron la infraestructura del salado por temas ambientales, pero sin refrigeración ni salado, los cueros se descomponen rápidamente”, alertó.