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martes, abril 23, 2024

Cierran al menos 10 estancias infantiles en León; ‘los más afectados serán los niños’, advierten educadoras

León, Gto. Por lo menos 10 estancias infantiles en León han cerrado. Los recursos del programa de la Secretaría de Bienestar, antes Sedesol, no llegaron. Desde enero, las 467 guarderías se mantienen en ‘vilo’, pues no han firmado convenios con el gobierno federal ni conocen las reglas de operación.

En Guanajuato se benefician con este programa 18 mil 600 niñas y niños, con edades que van del año hasta los 3 años y 11 meses de edad. Los menores reciben atención y cuidados durante ocho horas, dos comidas calientes y una colación.

Mientras las madres y padres trabajan o estudian, sin contar con prestaciones como afiliación al Instituto Mexicano del Seguro Social, no tienen en donde dejar a sus hijos en horas laborales.

Hace tres días, en conferencia de prensa el presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer que ahora entregarán el apoyo de manera directa a los padres y madres de familia de los niños inscritos en los centros de cuidado, siendo mil 600 pesos bimestrales, pues indicó que encontraron presuntas anomalías en la aplicación de los recursos a las estancias.

Cierran “Los Arlequines”

Entre 10 guarderías infantiles subsidiadas que cerraron sus puertas, está la de “Los Arlequines”. Hace una semana, según los vecinos de la calle de Artes ubicada en la zona centro de León, este lugar desde hace dos años daba el servicio de guardería a menores.

Vecinos de la zona dijeron que a finales de enero los encargados cerraron por falta de presupuesto. Afuera del local que rentaban con el número 146 de la calle, se observa el letrero de “se renta”.

En otras guarderías se han reducido los grupos de atención a menores. Tal es el caso de “Happy Kiddys” ubicada en la colonia La Florida. Silvia Borrego, directora de la estancia, dijo que han tenido problemas con los pagos del subsidio federal desde noviembre del año pasado.

Incluso recordó que fue hasta enero que les pagaron el mes de diciembre, pero aún no se firma el convenio para 2019. Desconoce que pasará con el programa o si existen reglas de operación.

La guardería le daba la atención a 60 niños pero se fueron 25 pues sus padres no tenían para cubrir los cobros que antes no se realizaban pues la estancia recibía ese recurso bajo subsidio. La reducción de los grupos, trajo consigo también la salida de dos maestras.

“Estamos en una situación muy lamentable porque verdaderamente las guarderías que antes eran de Sedesol, ahora no sabes bien si son de Bienestar. Era para madres que trabajaban o de padres solos que no podían pagar una guardería privada. Entonces ahora los papás, pues están pagando un servicio privado y lo costean, pero no saben hasta que tiempo seguirá así.

El gobierno federal nos dice una cosa un día y en la tarde nos dicen otra, al día siguiente amanece el presidente (Andrés Manuel López Obrador) y ya nos dijo otra. Estamos con una incertidumbre que no sabemos que va a pasar”, declaró.

El convenio se firmaba los primeros días del mes de enero de cada año y concluye en diciembre. Se suponía que se renovaría el convenio y salían las reglas de operación en febrero, pero no se sabe cuándo saldrán:
“ahora estamos a la espera de lo que diga el gobierno, y de lo que se les ocurra”.

Los más afectados son los niños, así lo advirtió Ana Heidi Vanesa Quintana, directora de la estancia infantil ‘Solecitos’. Por lo pronto, afirmó se les ha explicado que están revisándose las reglas de operación, aunque no de manera clara.

Expuso que como responsables del cuidado de los infantes, conocen muchas madres que, por su situación de pobreza, usarían esos recursos en otras cosas que no son para el cuidado de los niños, quienes actualmente en esta estancia reciben un programa académico, rutina de actividades y alimentación avalada.

La educadora señaló que actualmente la estancia ‘Solecitos’ continúa dando su servicio como si tuvieran la beca de la anterior Secretaría de Desarrollo Social, en espera de que a más tardar el 28 de febrero, se presenten las nuevas reglas de operación.

“Son población vulnerable y además estás vulnerando la integridad, la seguridad de los niños. Ellos no pueden elegir donde puede estar bien, donde reportar un abuso que se da principalmente n la familia, que no tiene espacio, que los abuelos lo van a cuidar, es decir, vigilar que sigan vivos”.

Por ello, la encargada de la estancia infantil pidió a los legisladores que evalúen lo que conlleva dejar a los niños sin una estructura sana en la primera edad.

“Si tal vez el argumento es que era la corrupción checar las estancias infantiles, estas al final trabajan. Que se investigue. Esas estancias tenían responsables, pero no se puede generalizar; las estancias tenemos fallas pero no a los niveles que se están manejando”.

Agregó que las labores sociales que hasta ahora desempeñan, al darles gratuidad en el servicio a madres de escasos recursos, sería imposible sostenerla sin el subsidio que hasta ahora les daba funcionamiento.

Viven incertidumbre

Para los padres de familia beneficiarios del programa, no es claro cómo recibirán el apoyo gubernamental o si tendrán que realizar un estudio socioeconómico para acceder. Coinciden en que al final tendrán que pagar más por el servicio para que cuiden a sus hijos.

La señora Ana Luz Espinoza, madre de una menor que actualmente es atendida en una estancia infantil, manifestó su preocupación ante una medida que no necesariamente le ayudaría lo suficiente. Recibir el apoyo directo sólo duplicaría el costo para recibir la asistencia con su hijo.

Indicó que cuando se enteró de lo que estaba pasando sintió pánico. Como trabajadora, el salario es ínfimo y aunque la estancia se mantiene sin movimientos en sus cuotas, eventualmente será necesario equiparar la ayuda directa con el subsidio directo a la estancia infantil.

“Dije ‘bueno, me van a dar 800 pesos para completar lo que estoy pagando’, pues no es mucho, pero da la casualidad de que tengo que dar lo que estoy dando más esos 800 pesos. Me va a salir más caro, no igual o más barato”.

Si las cuentas no le fallan a la señora Ana Luz el apoyo por niño en el subsidio, equivalía a 950 pesos “yo pagaba 950 con el apoyo eran casi 2 mil pesos, si uno se pone a ver tiene uno que contar, lo que uno paga y el apoyo de ahora, es más”.

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