León, Gto. Visitantes de la Deportiva del Coecillo se dijeron consternados tras enterarse de que, el pasado fin de semana, tres hombres fueron atacados a balazos mientras presenciaban un partido de fútbol en las canchas del lugar.
Durante la mañana del lunes, el ambiente en el centro recreativo, ubicado sobre el bulevar Congreso de Chilpancingo, en la colonia Linares, era tranquilo, en contraste con el despliegue policiaco que se registró el sábado por la tarde tras la agresión armada.
En ese hecho resultaron heridos José, de 46 años; Agustín, de 57; y Marcos Adrián, de 52, quienes fueron hospitalizados.
Ese mismo día, un joven de 20 años fue detenido por su presunta participación en los hechos cuando iba a bordo de una motocicleta y en posesión de cinco envoltorios de droga cristal.
“Cada vez la violencia se aparece en lugares recreativos como canchas donde la gente viene a practicar deporte y a ejercitarse por salud”, reclamó un visitante al llegar al lugar.
Otro de los entrevistados mencionó que el ataque fue contra espectadores, entre ellos un hombre con un historial marcado por la violencia: Marcos ‘N’, conocido como “El Atos”, sobreviviente de tres atentados previos y de la masacre en la que asesinaron a su familia en la colonia Industrial.
“Llegó a ser un gran jugador en los campos llaneros, pero con el paso del tiempo se metió en cosas turbias”, opinó un usuario de la deportiva.
El día del ataque, ya había presencia de elementos policiacos debido a un partido de béisbol entre los Bravos y los Diablos. Gracias a ello, la reacción fue inmediata y se solicitó atención médica para los lesionados.
El partido de fútbol fue suspendido mientras las autoridades acordonaban la zona.
“Tarde o temprano tu pasado te alcanza, y aquí es donde la balacera se da a plena luz del día, aunque haya policías cerca. Así de fácil cometen los ataques”, agregó otro ciudadano.
A días del atentado, los usuarios de la deportiva expresan preocupación y exigen que no se descuide la vigilancia en estos espacios.
“Ojalá también revisen las orillas de las deportivas, porque aquí se vienen a tomar o a drogarse, y eso no es solo los fines de semana, es todos los días”, advirtió uno de los asistentes.
