Guanajuato. Aunque los aspirantes a titular de la Procuraduría de Derechos Humanos de Guanajuato obtuvieron una calificación; hasta ahora no se conoce cómo se obtuvo esa puntuación.
José Manuel Ramos, aspirante a ombudsperson y que forma parte de la terna señaló que ni ellos ni los que quedaron fuera conocen la metodología que usaron los legisladores.
Pero además criticó el proceso y que en este no se considerarán nuevas entrevistas con los tres perfiles de donde saldrá el nuevo procurador.
“Hay una evaluación que llega a puntuar cuáles con los tres mejores candidatos y aparece Vicente Esqueda, Karla y yo y es la terna. Quiero resaltar: no responde a un metodología ni a un mecanismo, simplemente de la nada en un párrafo se da una puntuación para cada uno de los candidatos y esto tiene un riesgo, el riesgo es que puede dejar fuera buenos perfiles, perfiles compatibles con los requerimientos porque no se justifica por qué quedan fuera”, señaló durante una rueda de prensa.
En la terna comparte con el simpatizante panista Vicente Esqueda, de quien aseguró no se siente en desventaja siempre y cuando se justifique cada decisión.
“No me siento en desventaja, estoy acostumbrado a tener concursos y en donde las reglas están claras, si las reglas son claras, no tendría porque haber desventaja si las simpatías partidarias o de otro corte por tener experiencia de trabajar en la misma institución o estar apegados”.
El proceso que por primera vez llega a cabo el Congreso Local para definir a un nuevo procurador ha sido criticado, pero también los mismos aspirantes han abonado a la falta de contacto con la ciudadanía.
Prueba de ello es el desaire que hicieron cinco de los aspirantes al foro organizado por el observatorio ciudadano creado para seguir el proceso.
