León, Gto. El abuso de autoridad de profesores, acoso escolar de otros compañeros y la nula respuesta de directivos, llevó a Paola Ontiveros a abandonar su educación de nivel medio superior en el Conalep de León.
Lo que comenzó con una queja de la alumna por la falta de atención de una maestra en clases, se convirtió en una persecución por parte de los profesores y la directora del plantel.
El caso ya se encuentra en la Procuraduría de Derechos Humanos de Guanajuato (PDGH) así como en la Secretaría de Educación a nivel federal.
“Comenzó todo por una maestra que nos daba 15 minutos de clases de informática (Elizabeth Gómez Mendoza), y yo lo reporté y porque la maestra se expresaba mal en general de los alumnos, y cuando se supo del reporte un día llegó y pidió que se levantara la persona que lo había hecho”, comienza a contar Paola, que usa collarín, recientemente los médicos le pidieron tenerlo pues sufrió una tensión a causa del estrés.
Durante los primeros semestres de Paola, tuvo que ausentarse de clases por enfermedad por lo que se atrasó con trabajos de la clase de Contabilidad Bancaria y pese a presentar los justificantes, la profesora Angélica Thirión le impidió regularizarse en ellos.
La situación llegó hasta la oficina de la directora, en la que se levantó un documento a la maestra en donde se comprometía a darle el derecho a la alumna. A esta reunión además de la profesora y la directora Celia Torres asistió Mario Guerrero, del sindicato y la mamá de la afectada.
“En el documento dice que me iba a volver a aplicar el examen, lo hizo con distinciones solamente a mi me quitó formulario. Luego de la junta, pues otros profesores se empezaron a enterar y hasta alumnos que empezaron a hacerme como a un lado, yo le dije a la directora -porqué si hicimos algo a puerta cerrada, ya lo saben alumnos y otros profesores”, señala Paola.
Ante los diferentes señalamientos por alumnos y maestros, Paola decidió acudir a la Procuraduría de Derechos Humanos, en donde se abrió su expediente por la queja, y la investigación, de acuerdo con el organismo está en curso.
Sindicato y alumnos
Aunque su mal trago con la maestra de informática ya había pasado, en la materia de bancaria continuó, Paola señaló que le solicitaron mostrar su portafolio de evidencias al sindicato.
“La primera vez que me lo pidió la maestra si lo traía pero no se lo quise mostrar, ¿por qué tendría que mostrarle el portafolio al sindicato?”, mencionó la alumna.
Luego de presentar las denuncias en Derechos Humanos, Ontiveros buscó a la Dirección General del CONALEP con oficios y de forma personal, pero no tuvo respuesta.
También envió un documento al gobernador de Guanajuato, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo sobre el acoso que recibió.
Al inicio de este semestre ya en 2019, fue suspendida siete días en marzo por no llevar el uniforme, sin embargo asegura se trató de una petición para una exposición de clase misma que avala con un permiso otorgado por la misma institución.
Recientemente la alumna, solicitó su baja derivado de la situación que desde su inició escolar vivió y terminará su preparatoria en un colegio particular.
