León, Gto. Treinta mujeres y hombres trans presentaron de forma colectiva 30 amparos para pedirle a la autoridad estatal que reconozca quiénes son.
18 mujeres trans y 12 hombres trans comenzarán el proceso para lograr tener su acta de nacimiento bajo el nombre y sexo con el que se identifican.
Ricardo Gallardo y Julio César O’Farrel explicaron que tras el fallo a favor de reconocimiento de identidad de Devanny Cardie, mujer trans asesinada, esperan que la jurisprudencia se replique en el resto de casos.

“Tienen bastantes problemas para oportunidades, trabajo, discriminación, abusos por empleadores como de la sociedad, al realizar este tipo de trámite lo que hacemos es dignificar a las personas para que la expresión de género coincida con sus papeleos”, señaló Ricardo Gallardo.
Antes de que Devanny fuera asesinada, comenzaron su proceso de reconocimiento de identidad mismo que fue positivo, sin embargo, ella ya no estaba para disfrutar de su verdadera identidad.

“En Guanajuato no existe ninguna ley que permita a las personas trans cambiar su identidad, por lo que han tenido que viajar a otros estados, sin embargo al regresar a la entidad no se respeta su nueva acta por lo que tienen doble identidad”, explicó Gallardo sobre el proceso.
Mujeres y hombres de San Francisco del Rincón, Silao, Guanajuato, León, Irapuato y Salamanca llegaron al Poder Judicial en León para comenzar con el proceso de amparo, mismo que tiene una duración de alrededor de 2 meses.

A la par de los amparos de reconocimiento de identidad, también se comenzó el trámite de tres resguardos de acta, esto significa que en Guanajuato el Registro Civil ya no le de uso a la original y tome la nueva con la identidad elegida por la persona.
“Son tres resguardos que tuvieron que acudir a otro estado para hacer su cambio y ya cuentan con su INE pero al haber nacido en Guanajuato el estado no les reconoce, las autoridades lo están obligando lo cual es un delito federal, necesitan ponerse en orden”.
Siempre hemos luchado por ser quienes somos
Patty Hernández señaló que muchas y muchos trans no se habían acercado a ninguna autoridad para realizar el trámite por el costo y la posible discriminación.
“No dejamos de ser personas, que necesitamos respeto, vamos a algún lugar y no te respetan por quien eres y hay que dar explicaciones; en trabajos, en restaurantes hasta en los baños. Queremos los mismos derechos”, contó Patty.

Vivian Cuevas explicó que cualquier trámite es un problema pues en su identificación aparece el nombre de alguien que no es y eso es una limitante para acceder a mejores trabajos.
“Esto no te sirve, te dicen que no es oficial si tienes propiedades para la autoridad sigues siendo Juan y no eres quien eres, yo no lo quise hacer porque ya amigas le rechazaban la documentación”, mencionó Cuevas.
Dentro del grupo de 30 personas, está también Oliver de apenas 18 años quienes se aventurará a realizar el trámite sin que sus papás lo sepan.
