Guanajuato, Gto. Una vez más el proyecto de construcción de la Presa de la Tranquilidad se estancó debido a la falta de recursos, y a las afectaciones que ha causado la pandemia de COVID-19.
El director del Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Guanajuato, (Simapag), Mario Ortega, reconoció que ante las condiciones que se viven en el municipio, este año no se tienen considerado arrancar con los trabajos de la presa que fue anunciada como una solución, para el problema de escasez de agua.
“Ahorita estamos enfocados a llevar el agua de los pozos a la ciudad, el proyecto es bandera para el organismo operador, lo cual no significa que lo dejemos de lado, sino que estamos buscando la gestión de recursos a nivel federal, para lo cual tenemos listos los proyectos para ver si este año pudiéramos ser favorecidos a través de Conagua, o del Estado a través de la Comisión Estatal del Agua (CEAG)”.
El proyecto de la nueva presa de “La Tranquilidad” fue anunciado desde 2013 por el entonces alcalde del PRI, Luis Gutiérrez Márquez, pero fue hasta marzo del 2014 cuando se anunció oficialmente como una obra muy importante para la ciudad, pues las presas de las que se abastecen la capital están muy azolvadas, y del sistema de Pozos de Puentecillas cada vez se extrae agua de mayor profundidad.
En el 2015 se anunció el arranque de la construcción en las inmediaciones de la antigua presa de Burrones. Se estimó una inversión inicial de 250 millones de pesos, pero en 2016, siendo alcalde Edgar Castro Cerrillo, se informó que su costo se había elevado 100 millones de pesos más.
Fue en ese año cuando se informó que fueron invertidos 23 millones de pesos, en la compra de 23 hectáreas.
Pero la última inversión que se hizo fue en el 2019, por alrededor de 40 millones de pesos para la obra de desvío.
Ya en el 2020 el Simapag no destinó recursos para continuar con los trabajos. En una declaración que hizo el director el 12 de agosto, señaló que la segunda etapa de la obra no estaba planeada por falta de recursos.
Este año la situación no es diferente, Mario Ortega admitió que tampoco hay recursos para inyectar al proyecto.
“Si se tiene considerado seguir trabajando en el recurso, lo que nos toca ahorita es garantizar de manera inmediata el suministro del líquido, por el momento no está considerado arrancar con los trabajos de la presa de la Tranquilidad”.
Finalmente, recordó que para poder concluir con la construcción de la nueva presa se necesitaría una inversión de 200 millones de pesos, que incluye además de la construcción, la obra de toma y obras accesorias.
